Rodrigo Vergara, presidente del Banco Central
Álex Valdés, El Mercurio
SANTIAGO.- El Banco Central (BC) recortó por segunda vez consecutiva la proyección de crecimiento para la economía chilena desde el rango 2,25 y 3,25% hasta 2,0 y 2,5%, a la vez que elevó su previsión de inflación.
De acuerdo al Informe de Política Monetaria (IPoM), correspondiente al mes de septiembre, que expone el presidente del emisor, Rodrigo Vergara, ante el Congreso pleno, "un escenario externo peor, una actividad minera deteriorada y la falta de antecedentes sobre una mejoría del consumo y la inversión privada, hacen prever que el crecimiento del segundo semestre será menos que lo anticipado en junio".
La proyección para 2016, en tanto, se ubicó entre 2,5 y 3,5%.
Inflación
El ente rector elevó de manera importante su previsión para la inflación a diciembre de 2015 desde un 3,4% hasta 4,6%. El indicador seguirá ubicándose por sobre el rango de tolerancia al menos durante toda la primera parte del próximo año, completando dos años por encima del 4%.
Según explicó la entidad, la fuerte depreciación del peso chileno ha sido la principal causa del aumento del IPC y se espera que siga afectando la dinámica inflacionaria en los meses siguientes, retrasando su convergencia a 3% hasta el curso de 2017.
De mantenerse esta situación, el IPoM aseguró que podría haber implicancias en la política monetaria, cuya tasa actualmente se ubica en 3%.
Precio del cobre
El deterioro del crecimiento del mundo emergente y, en especial, China, el mayor demandante de materias primas y la volatilidad de los mercados financieros internacionales, causaron una importante corrección para la proyección del precio del cobre, que ahora se estima que promediará US$ 2,5 y 2,45 la libra en 2015 y 2016, respectivamente.
Estas estimaciones se comparan con las proyectadas en el anterior IPoM de junio que había situado al metal rojo en US$ 2,8 y 2,9 la libra para 2015 y 2016, respectivamente.
PIB tendencial
En esta ocasión, el Consejo Del Banco Central revisó su estimación de crecimiento para el PIB tendencial o de mediano plazo, situándolo en 3,5%, cifra por debajo a lo estimado hace un año cuando lo proyecto entre un rango de 4,0 y 4,5%.