SANTIAGO.- El fin es mejorar las pensiones en el país. Para eso, la Comisión Asesora Presidencial, conocida también como la Comisión Bravo, entregó su esperado informe con un total de 58 propuestas.
La instancia, que fue conformada tanto por expertos nacionales e internacionales, primero que todo se inclinó por dos sistemas, rechazando de plano un sistema de reparto (ver abajo los motivos). Es así que dos propuestas se llevaron la mayor parte de la preferencias de los comisionados:
A: Mantener el actual sistema de pensiones, pero reforzando el sistema de pensiones solidario integrado por el sistema de ahorro individual. Un total de 12 comisionados apoyaron esa opción, incluyendo David Bravo, presidente de la instancia.
B: En tanto, 11 comisionados señalaron que para poder resolver los problemas del sistema era necesario adicionalmente hacer una reforma de carácter mas estructural, proponiendo un sistema mixto (tripartito) donde una fracción de los ahorros de las personas van a un sistema de cuentas nacionales.
Sin perjuicio de lo anterior, los integrantes de la comisión avanzaron en un conjunto de 58 propuestas específicas entre las que destacan:
-Fortalecer de manera significativa el pilar solidario, a través de una propuesta para aumentar en un 20% la pensión básica solidaria, también la pensión máxima con aporte solidario, y se propone, a su vez, que el pilar solidario debiera apuntar a ser universal, cubriendo a lo menos el 80% de la población. Actualmente cubre el 60%.
-Considerar un sistema, mas que basado en una ficha de protección social, que esté basado en un test de afluencia, vale decir, que todas las personas del 20, 30, 40, del 50% inferior de ingresos no debieran hacerse ninguna ficha, descartando a las personas de más altos ingresos.
-Para aumentar el ahorro, la Comisión propone que se incrementen las tasas de cotizaciones desde el actual 10% hasta un 14%. Esos cuatro puntos adicionales debiera ser una cotización que es de cargo del empleador. Y una fracción de esa comisión debería ir a un fondo solidario, o sea, debiera también haber solidaridad no solo con recursos del Estado, sino también con los recursos del cotizante.
-Otra de las propuestas más relevantes es la igualdad de género. Par ello, se propone aumentar la edad de jubilación en mujeres de 60 a 65 años, lo que aumentaría del orden de un 40% las pensiones, según la instancia. Lo anterior se haría de manera gradual y en base al año en que nacieron.
-Además se plantea que debería haber cuentas compartidas, es decir, el 10% que debe cotizar un hombre, la mitad de esa cotización vaya a la cuenta de la esposa o la persona con quien tenga una relación formal de convivencia en virtud de un acuerdo de unión civil, para disminuir las diferencias salariales.
-La comisión establece también que las tablas de mortalidad deberían ser unisex
-La comisión propone la eliminación, en un cierto periodo de gradualidad, del retiro programado, debido a que no es considerado acorde con la seguridad social.
-La comisión considera importante que se reduzca la variabilidad, especialmente, en edades cercanas a la edad de jubilación.
-Se propone ejemplificar el sistema, como por ejemplo, bajar el número de los actuales 5 fondos en los que las personas cotizan.
¿Cómo mejorar la competencia en el sistema?
La Comisión, según el presidente de la instancia David Bravo, respalda con énfasis el proyecto de ley de AFP estatal que está en el Congreso. La nueva entidad podría ayudar a mejorar la competencia del sistema.
Además es fundamental que en las licitaciones de afiliados, que se realizan desde 2008, incorporen a antiguos afiliados, añadió.
¿Cuál sería el beneficio de estas propuestas?
Actualmente, las tasas de reemplazo de Chile (en hombres inferior al 60% y en mujeres menos del 31%) son inferiores a las de los países de la OCDE. La brecha que hay con las naciones de ese organismo, en el caso de lo hombres chilenos es del orden 18 puntos porcentuales (pp) menos, mientras que en el caso de las mujeres es de 30 pp.
Con las propuestas, la Comisión busca que las tasas de reemplazo en caso de los hombres aumenten del orden de 13 puntos, y en mujeres en 29 puntos.
¿Por qué se rechazó un sistema de reparto?
Según el economista David Bravo, presidente de la Comisión Asesora Presidencial, este sistema se descartó porque "es una propuesta que afecta de manera sustantiva el ahorro… Y en segundo lugar, es una propuesta que no nos parece que sea sostenible fiscalmente ni tampoco sostenible en el tiempo".