SANTIAGO.- No sólo el Producto Interno Bruto (PIB) permite medir cuán desarrollado o exitoso es un país. Desde el 2006 que el
"World Happiness Report", publicado cada tres años por la Fundación de la Nueva Economía (NEF, por sus siglas en inglés), también es un parámetro.
A raíz de ello es que la OCDE en 2011 desarrolló el Better Life Index. Algunas naciones, como EE.UU., Francia e Inglaterra, incorporaron este indicador para medir el desempeño de sus economías.
En la última versión de dicho estudio, Chile se ubicó en el lugar 27 a nivel mundial y sexto en Latinoamérica, con 6,670 puntos (de una escala del 0 al 10). En primer lugar se ubica Suiza con 7,587 puntos y en el último Togo con 2,839.
Los tópicos que se tomaron en cuenta fueron el PIB per cápita, apoyo social, esperanza de vida, libertad para tomar decisiones de vida, generosidad, percepción sobre corrupción y distopía.
Tomando en cuenta este reporte, la Cámara Nacional de Comercio, Servicio y Turismo (CNC) junto a la consultora JapiWorks publicó el Estudio Nacional de la Felicidad en el Trabajo, donde definió qué tan felices somos los chilenos en el trabajo.
Dentro de los resultados que más destacan se cuenta que 68% de los encuestados cree que es muy importante la felicidad laboral. Por otra parte el 59% de ellos se siente feliz cuando está en el trabajo.
Los trabajadores menos felices tienen una edad entre 18 y 30 años, son mujeres del estrato ABC1 de la Región Metropolitana y ocupan puestos de directores, gerentes y profesionales.
En tanto, los más felices tienen más de 55 años, son variones de los segmentos C3 y D de la zona norte del país y son oficiales, operarios y artesanos.
¿Por qué es importante la felicidad en el trabajo?
Para el experto en felicidad Nic Marks, fundador y director de Happiness Works y creador del Happy Planet Index, entre los factores importantes en este ámbito se cuenta la combinación de las condiciones externas con los recursos con que cuentan las personas.
"La felicidad no es sólo un resultado, sino que un sentimiento: nos sentimos bien cuando las cosas salen bien", explica.
"Hace algunos años que la ONU estableció un nuevo paradigma de desarrollo y porque ya se ha demostrado que el PIB no es el mejor indicador para mostrar el bienestar de la economía de los pueblos. Puede que aumente el PIB, sobre todo en los países más ricos, pero el nivel de bienestar no aumenta e incluso puede bajar", añade José Antonio Cousiño, director de JapiWorks, durante el tercer encuentro del Comercio 2015, "La Felicidad Laboral: Un asunto de negocios".
"Tenemos que ver cómo están las personas, y vemos que cuando las personas están bien, están contentas y se sienten bien trabajan mejor, y cuando la gente trabaja mejor a las empresas les va mejor y aumenta la productividad hasta en 30%. También les va mejor en sus valores accionarios y pueden incrementar sus inversiones hasta en 3 o 4% anual", describe.
"Este aspecto es un buen negocio para todos y si a las empresas les va bien, a Chile le va bien", declara.
En tanto, el presidente de la CNC, Ricardo Mewes, subraya que en el actual escenario "de pesimismo y desconfianza, es necesario volver la mirada hacia lo esencial, y lo esencial son las personas y nuestros trabajadores. No bastan los indicadores económicos para medir el bienestar de una sociedad, pues la felicidad también juega un rol fundamental en el desarrollo de los países y sus habitantes".