SANTIAGO.- McDonald's viene anotando siete trimestres a la baja y dos han sido las razones fundamentales: la irrupción de la alimentación y la vida saludable, así como también los cambios en la conducta de los consumidores.
Entre el periodo enero-marzo de este año los ingresos de la firma estadounidense cayeron 22,3% a US$ 2 mil millones y es precisamente el mercado de ese país el que le ha dado más dolores de cabeza. De hecho, el martes se supo que por primera vez, desde 1970, McDonald's reducirá este año el número de restaurantes.
La compañía no reveló cuántos cierres habrá, aunque señaló que se tratará de "una cantidad mínima" si se compara con los más de 14 mil que continúan operando en Estados Unidos y los cerca de 35 mil que funcionan en 119 países de todo el mundo.
"McDonald's sufre una fuerte crisis económica y puede que estemos ante sus últimos días", comentaron al respecto algunos dueños de las franquicias estadounidenses de la firma, consignó el diario británico The Independent.
Un nuevo escenario
La estrategia por revivir a McDonald's en los mercados desarrollados ha ido desde potenciar su servicio de cafetería matutino hasta la apertura de ciertos locales al estilo "tradicional", pero nada parece estar dando resultados, dice
"El Mercurio".
Según el diario El Mundo, ahora que la mayoría de los estadounidenses han salido de la crisis, el precio ha dejado de ser la principal motivación para acudir a los restaurantes de comida rápida. Por el contrario, están más preocupados por la calidad de los alimentos, después de la difusión de videos que muestran la elaboración de algunos de los productos servidos en esos restaurantes
Así, se pusieron de moda los restaurantes conocidos como fast casual. Chipotle, un establecimiento de comida mexicana de calidad, y Shake Shack, una hamburguesería que encanta a los hipsters, lideran esta nueva forma de entender la comida rápida.