BRUSELAS.- El Grupo de Trabajo del Euro, formado por los "número dos" de los ministros de Economía y Finanzas de la Eurozona, analizaron este viernes el acuerdo entre las instituciones acreedoras y Grecia sobre los requisitos que tenía que adoptar Atenas para poder acceder a un subtramo de 2.000 millones de euros (US$ 2.128 millones).
En la cita había un "amplio acuerdo" sobre el desembolso de los 2.000 millones de euros y de los 10.000 millones de euros (US$ 10.642 millones) para recapitalizar la banca griega, pero quedaban algunos "detalles por aclarar", dijeron fuentes de la Eurozona.
De esta manera, se espera que la zona euro dé probablemente mañana su visto bueno final al desembolso, indicaron las fuentes.
El Grupo de Trabajo del Euro analizó el paquete de medidas previas que quedaban pendientes, después de que el jueves el Parlamento griego adoptara las leyes necesarias para implementar algunas de ellas, como la polémica norma sobre ejecuciones hipotecarias.
A la espera de que se aclaren algunos detalles, la eurozona está preparada para apoyar el desembolso del subtramo de 2.000 millones (US$ 2.128 milllones) y para transferir al Fondo de Estabilidad Financiera del Estado Heleno (HFSF) los fondos necesarios para la recapitalización del sector bancario griego.
Los 10.000 millones de euros reservados por la eurozona para la recapitalización de la banca se encuentran en una cuenta segregada del fondo de rescate de la eurozona, el MEDE, a la espera de la autorización de los países miembros para ser transferidos al HFSF.
Las recientes pruebas de resistencia efectuadas a la banca griega han arrojado unas necesidades adicionales de capital de entre 4.000 millones de euros en el escenario base y de 14.400 millones en el adverso en las cuatro principales entidades financieras.
El acuerdo entre las instituciones acreedoras y Atenas incluye un consenso sobre los precios de los medicamentos genéricos, sobre la legislación del HFSF para garantizar mejoras en la gobernanza del sector financiero y en legislaciones, así como una estrategia para hacer frente a los créditos morosos y la protección de las primeras viviendas.