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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 11:09
SANTIAGO.- El peso argentino se aproxima a otra jornada de pérdidas, por segundo día consecutivo, luego que el nuevo Gobierno de Mauricio Macri eliminara las controles cambiarios que pesaban sobre la divisa desde 2011.
El jueves, en la primera sesión de la puesta en marcha de esta medida, la moneda argentina perdió un tercio de su valor frente al dólar, llegando a 13,4 pesos. El miércoles, la moneda se cotizó en 9,8 pesos.
"Estamos muy tranquilos porque siempre creímos que empresas y el público tenían más dólares de los que necesitaban", sostuvo el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, en diálogo con periodistas.
Sin embargo, el monto de operaciones de cambio fue de US$ 125 millones, la mitad que el último día con restricciones.
El "cepo cambiario" comenzó en noviembre de 2011 en el país trasandino para evitar la fuga de capitales que se estaba desarrollando con la desaceleración económica del país y la incertidumbre que provocaban las medidas implementadas por el Gobierno de Cristina Fernández.
Entre las herramientas restrictivas estaba que las personas y empresas necesitaban la autorización de Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) para comprar divisas con un monto determinado y se estableció un impuesto del 35% para comprar con tarjetas de crédito en el exterior.
"Soltar la moneda y dejar de lado los controles cambiarios significa que es el mercado el que le pone el precio al peso argentino y no el Estado. Es una práctica que la mayoría de las economías que han adoptado las medidas capitalistas abrazaron ya que de esta forma la moneda actúa como un 'buffer' (amortiguador): cuando salen dólares de tu economía tu moneda se devalúa, te haces más competitivo y eventualmente aumentas el ritmo de la actividad nuevamente", explica Daniel Soto, jefe de Estrategias de Inversión de ForexChile.
Para el analista de mercados este cambio de estrategia cambiaria sí tendrá un efecto inmediato para los turistas que compraban dólares en las casas y bancos oficiales.
"Un chileno que estaba acostumbrado a viajar y cambiar al tipo de cambio oficial, con esta nueva medida pasará de pagar precios altos a pagar precios parecidos a los de Chile", explica Soto.
"Sin embargo, creo que estos son los menos. Para el turista que solía tener acceso al tipo de cambio del mercado negro no va significar prácticamente nada", explica Soto, refiriéndose al "dólar blue" que ofrecían los conocidos "arbolitos", vendedores informales de dólares en el centro de Buenos Aires.
En general, el experto recomienda a los turistas chilenos que viajen al país vecino comprar pesos argentinos en Chile.
Con este aumento que tendrá el precio del dólar en el país vecino, se espera que también suba la ya alta inflación, que está en torno al 23% anual.
Ese el principal motivo de por qué Argentina dejó de ser el atractivo país de precios de comida, vestuario y libros baratos para el turista chileno.
"Más allá de las medidas económicas, los desafíos se encuentran centrados en hacer retroceder los indicadores de inflación en una economía que entraría en recesión en los próximos trimestres", detalla un informe de BCI Estudios.
"Ahora que se resolvió el tema cambiario, hay que ver cómo no se traslada a los precios y también ver qué pasa con las paritarias (negociaciones colectivas para recomposición salarial)", advirtió al canal Todo Noticias (TN) el diputado José de Mendiguren, ex presidente de la Unión Industrial Argentina.
"No vamos a permitir que la crisis solo la paguen los trabajadores", advirtió el sindicalista Leonardo Fabré.
"La incidencia del dólar es muy diferente en cada sector. Lo único que puedo decir es que en ningún caso el traslado a precios va a ser del ciento por ciento. Las empresas de la cámara este año exportamos alimentos industriales por US$ 27 mil millones e importamos sólo por mil millones. Hasta ahora se venían comprando al tipo de cambio oficial, pero antes de analizar cada caso habrá que ver dónde queda el dólar", sostuvo ayer al diario Página/12, Daniel Funes de Rioja, presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios.
