SANTIAGO.- De mala manera terminó 2014 para CMPC. El 24 de noviembre de ese año comenzó en Colombia uno de los períodos más difíciles y oscuros para la compañía ligada al grupo Matte.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) formuló cargos contra Drypers Andina -filial de CMPC en ese país- y otras cuatro firmas, por fijar artificialmente los precios en el mercado del papel higiénico, las servilletas, las toallas de cocina y los pañuelos para cara y manos.
Tres de las cinco compañías, cuyos nombres -a diferencia de Chile- todavía tienen el carácter de confidenciales, se acogieron al beneficio de la delación compensada, con el fin de eximirse o rebajar considerablemente su sanción.
Según informa
"El Mercurio", en Colombia ya finalizó la fase de prueba y durante los próximos días las involucradas realizarán alegatos.
En entrevista al diario colombiano "La República", el superintendente de Industria y Comercio (SIC), Pablo Robledo, afirmó que la SIC dictará sentencia en el caso entre mayo y junio.
De cumplirse estos plazos, Colombia sería el primer país de Sudamérica que se pronunciará sobre una conducta que se ha repetido en, al menos, tres países de la región.
Reacción en cadena
Después de Colombia, el escándalo siguió en Chile, cuna de CMPC. Un cartel entre su filial Tissue y SCA Chile (ex Pisa) sobre los mismos productos, se detectó gracias a que la Papelera accedió al mecanismo de la delación compensada, en marzo del año pasado.
El 28 de octubre, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó un requerimiento ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) contra las empresas que acordaron la fijación de precios, CMPC Tissue y SCA Chile. Luego se iniciaron juicios en sede civil, penal y una mediación colectiva ante el Sernac.
EL TDLC ya resolvió comenzar la fase probatoria del asunto y determinó los hechos y circunstancias sobre los cuales la FNE y las empresas deberán discutir. Según el TDLC, desde que se ingresa el requerimiento hasta la dictación de la sentencia hay un plazo aproximado de 10 meses -a la fecha de hoy ya quedan siete meses de plazo-, sin contar el tiempo que demoraría el juicio en caso de presentarse recursos contra la resolución del TDLC.
El negro 2015 para CMPC continuó en Perú. A través de su filial, Productos Tissue del Perú S.A. (Protisa), en diciembre se confirmó que la empresa se acogió al programa de clemencia -mecanismo similar a la delación compensada- y denunció la colusión que acordó con Kimberly-Clark sobre los mismos productos afectados en Colombia y Chile, pero en este caso, ante el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual (Indecopi).
Según la autoridad peruana, las firmas involucradas ya realizaron sus descargos. La etapa probatoria durará un plazo máximo de siete meses y luego se emitirá un informe técnico.