SANTIAGO.- Los precios del pretróleo acumulan un alza de más de 45% comparados con el mínimo de 13 años alcanzado en febrero, impulsados por las negociaciones entre los grandes productores de crudo.
La Agencia Internacional de Energía respaldó este optimismo al afirmar el viernes que los precios podrían haber tocado fondo y proyectó un descenso de casi 530.000 barriles diarios en la producción estadounidense este año.
Sin embargo, hay analistas que sostienen que el repunte podría causar más perjuicios que beneficios, debido a que alentaría a las empresas de energía de esquisto a volver a incrementar su producción, lo que nublaría las previsiones de un menor suministro estadounidense, explicó The Wall Street Journal.
Los yacimientos de esquisto se pueden perforar mediante la fracturación hidráulica en cuestión de meses, mucho más rápido que otros tipos de reservas en las que se trabaja por años antes de explotarlas.
"Mi preocupación es que si el mercado se vuelve a disparar a US$50 el barril (...) acabaremos con otro problema dentro de seis meses", señala Jeffrey Currie, director de investigación de materias primas de Goldman Sachs. Advirtió que "uno estaría asumiendo mucho riesgo al entrar a este mercado tan temprano".
Goldman Sachs indicó en un informe divulgado el viernes que el suministro almacenado de petróleo y productos refinados tiene que caer antes de que se produzca un repunte de precios sostenible.
El aumento del petróleo ha sido parte de un repunte de las materias primas que también abarca desde los precios del oro y el cobre hasta los del cacao y la carne de cerdo.
En el caso del crudo, sin embargo, muchos inversionistas reconocen que todavía buscan indicios de un aumento significativo de la demanda de materias primas o una caída importante del suministro que justifique las alzas de precios.
"Nos hemos movido demasiado con tan poca información", advierteGeorge Zivic, gestor de portafolio del Oppenheimer Commodity Strategy Total Return Fund, que administra US$250 millones. La semana pasada, cerró sus posiciones de cobre, aluminio y zinc.
Los aumentos en los precios de los commodities a menudo se topan con el mismo dilema: ¿acaso un súbito repunte de las cotizaciones llevará a un incremento de la producción y a un exceso de oferta en el mercado? La recuperación del crudo en el segundo trimestre del año pasado demuestra que esto puede ocurrir.
Los precios del petróleo subieron 40% entre mediados de marzo y comienzos de mayo de 2015 y llegaron a US$60,75 el barril después de haber descendido a US$43,46.
Los inversionistas se lanzaron ante las expectativas de que el derrumbe de los precios desataría una veloz caída de la producción de esquisto de EE.UU. Los analistas proyectaban que los precios ascenderían a US$70 el barril para 2016.
El exceso de oferta de petróleo parece estar aliviándose respecto de la situación que imperaba hace un año. Sin embargo, la producción iraní aumentaría este año en cientos de miles de barriles al día, dicen analistas, conforme se levantan las sanciones internacionales.
Los inventarios de crudo estadounidense están en su nivel más alto en más de 80 años.