SANTIAGO.- El pasado miércoles 6 el empresario Mario Henríquez Véliz (73), del rubro de la construcción, pasó por casualidad a las oficinas de Onix Capital del Grupo ArcanoY fue entonces que se enteró.
"Mi ejecutivo me comentó que está la escoba. No es que nadie me haya llamado para avisarme, sino que yo vine a ver qué pasaba, y me dijeron: 'Mario, estamos con un problema súper grave, porque se estancaron las platas. Pero ya tenemos un aviso del propietario (Alberto Chang), que está mandando dinero. Y de hecho, ya mandó'", revela Henríquez a El Mercurio.
"Yo creo que (Alberto Chang, fundador de Arcano) hizo el envío (del dinero) para darse el tiempo de cerrar todo", reflexiona Henríquez, desmoralizado.
-¿Cuándo le señalaron que hizo el envío de plata?
"Me dijeron que el miércoles. Al día siguiente no quedó nadie en las oficinas".
Ese fue el mismo día en que, en un correo fechado a las 17:32 horas, Alberto Chang comunicó a su madre, Verónica Rajii, y a altos ejecutivos de su empresa que había decidido retirarse de su trabajo, de su empresa y de su vida. El jueves no había quién diera la cara.
"He escuchado comentarios de la carta que mandó. No le creo nada que se vaya a suicidar. Yo creo que aquí estamos liquidados, porque debe haber pasado sus platas a paraísos fiscales, y ahí no hay cómo sacarlas", agrega.
Durante un año le pagaron cumpliendo los plazos
Henríquez relata que al principio estaba contento. "Un amigo me contó que se había enterado por un empresario importante que ellos ofrecían un porcentaje altísimo: uno punto cinco. Yo justo estaba buscando a alguien con quien poner un poco. '¡No, estái loco!', le respondí. '¡Quién va a dar eso!' Y fui y coloqué los $30 millones, y me respondieron durante un año. Y me pagaron religiosamente".
"Debo haber ganado tres millones y medio en un año. A mí mensualmente me abonaban, y yo retiraba. El abono era de unos $350 mil mensuales. El primer año funcionó bien. El segundo año mi ejecutivo me propuso volver a invertir. No me presionó, pero sí debió haberme dicho que la empresa tenía problemas. Me pagaron un mes este año, y hace dos que no me pagan. Y están mis 30 millones iniciales".
Ayer su ejecutivo lo llamó por teléfono -según explica-, y le dijo que no se preocupara, que se iban a resolver las cosas y que esperara.
"Le creo a mi ejecutivo, me dice que él también puso plata, igual que muchas personas de la empresa. Antes hablaban de lo fantástico que era este hombre (Chang) para hacer negocios. Yo pienso sencillamente que el tipo se guardó plata de alguna manera", añade el empresario.
Sin embargo, Henríquez no pierde la esperanza de recuperar el dinero.
"Cuando ya me dé cuenta de que me hicieron leso y de que no hay vuelta, voy a dar los nombres de toda la gente que está relacionada …Yo soy rango medio, pero hay gente que puso todo lo que tenía. Ellos sí que la van a sufrir muchísimo. Igual yo me saqué la mugre trabajando, y ahora ¡que me vengan a robar...!".
Concluye que "lo que más me molesta es que el resto de la empresa haya abandonado y deje a los clientes botados. Tengo entendido que tenían sus sueldos pagados".