BERLÍN.- La canciller alemana, Angela Merkel, reafirmó su apoyo al tratado de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos (TTIP, por sus siglas en inglés) a pesar de los documentos publicados por Greenpeace de los que se desprende que Estados Unidos está presionando a Europa más de lo que se creía.
La mandataria alemana sigue apostando por agilizar las negociaciones y conseguir un acuerdo lo antes posible. "Creemos que es muy importante un cierre rápido de un ambicioso acuerdo", afirmó el vocero del Gobierno alemán, Steffan Seibert. "Esta es la opinión unánime de todo el Gobierno", agregó.
La canciller ya dejó clara su posición durante la reciente visita del presidente estadounidense, Barack Obama, en la Feria de Hannover, recordó el vocero.
El TTIP es una gran oportunidad para dar forma a la globalización. Alemania como nación exportadora depende como casi ninguna otra economía de un comercio mundial libre. Uno de cada cuatro puestos de trabajo depende de ello en Alemania, indicó Seibert.
No obstante, dejó claro que en el "TTIP Leaks" sobre las exigencias estadounidenses se trata de "posturas negociadoras, no resultados de las negociaciones". Es normal que las dos partes quieran imponer sus intereses, señaló. Alemania no aceptará ninguna reducción de los estándares de protección social, medio ambiente y del consumidor, agregó.
Una vocera del Ministerio de Economía apuntó por su parte que no va a haber "carne hormonada" alguna en la UE. Los estándares de protección para personas, animales y medio ambiente no se cuestionan en el TTIP, al igual que tampoco el principio preventivo vigente en la UE por el que sólo se permiten productos que se pueda demostrar que no son dañinos para las personas ni el medio ambiente.