BLOOMBERG.- Tres fabricantes de componentes para smartphones, que raramente captan la atención de los inversionistas, publicaron sus resultados trimestrales esta semana. Todas son decepcionantes y auguran tiempos difíciles para las empresas que prosperaron con la fiebre de este mercado.
Los beneficios de Pegatron, que ensambla iPhones, no alcanzaron las previsiones y la empresa anunció una caída de la facturación en abril del 16%. Los ingresos y beneficios de Minebea, que fabrica luces LED para celulares, no alcanzaron sus propias previsiones. Por su parte, Japan Display, proveedora de pantallas para Apple y otros fabricantes, dijo que los beneficios se habían deteriorado tan rápidamente que registrará pérdidas en todo el ejercicio fiscal y tuvo que dar marcha atrás en su promesa de dividendos.
Estas compañías ocupan los primeros puestos en la cadena de suministros, por lo que frecuentemente suponen una indicación del futuro que depara a gigantes como Apple, Samsung y Xiaomi.
Ahora algunas compañías se enfrentan a tres posibles dificultades: la caída de las ventas, una intensificación de la competencia por cuota de mercado y una reducción de los precios.
"El mercado de los smartphones continuará desacelerándose este año. La competencia se intensificará y es posible que los precios continúen cayendo", dijo Richard Ko, analista de KGI Securities a Bloomberg.
Pegatron y el resto de fabricantes son los ejemplos más recientes de los malos augurios para un mercado que se enfrenta a su mayor desaceleración desde que Apple introdujo el iPhone en 2007.
Gran parte del pesimismo se centra en China, que ha sido un motor de crecimiento espectacular y ahora se dirige hacia una caída épica. Los smartphones ya no son una novedad y la mayoría de las marcas internas se centran en un mercado de precio bajos o medios, donde los usuarios no renuevan los productos con tanta frecuencia como los consumidores de alta gama como Apple y Samsung.
FIH Mobile, que ensambla equipos para Sony, Lenovo y Xiaomi, apenas prevé beneficios para el primer trimestre. Los tres clientes registraron una caída de las ventas en el trimestre que finalizó en marzo.
Ciertamente no todos auguran un futuro desolador. Los optimistas señalan que miles de usuarios en los mercados emergentes -como la India- aún tienen que adoptar la tecnología de alta velocidad 4G, lo que impulsará las ventas.
Si bien Taiwan Semiconductor Manufacturing reconoce las dificultades, la compañía -uno de los principales fabricantes de procesadores para celulares- manifestó su confianza el mes pasado de que dispositivos de gama media, más funcionales y potentes, captará un sector de mercado orientado a los costes en los países emergentes.
El próximo indicador clave de la evolución del mercado será en septiembre, fecha en la que Apple suele introducir nuevos modelos de iPhone.
Tradicionalmente la venta de nuevos productos estimula el mercado durante la temporada de vacaciones del hemisferio norte y podría ofrecer cierto alivio a los proveedores de microchips y otros componentes. Pero aún faltan cuatro meses para eso.