SANTIAGO.- Debido al alza en el tipo de cambio, este 2016 se perfilaba como un buen año para las exportaciones chilenas. Sin embargo, otros factores, como el clima, impactaron los volúmenes de producción, complicando los envíos de los productos que vende el país en el exterior.
El director del Instituto de Economía de la Universidad Gabriela Mistral, Erik Haindl, indicó en un artículo de
"El Mercurio", que las exportaciones este año exhibirán, en general, un retroceso fuerte en términos de valor. "Lo que está pasando es que tanto nuestro valor como la cantidad física exportada están cayendo y eso es bien preocupante", planteó.
Además, estimó que los envíos de bienes más importantes registrarán menores desempeños que en 2015. Las bajas serían lideradas por las exportaciones de cobre, afectado por el bajo precio del metal, que según Haindl, retrocederían en US$6.117 millones, casi un quinto menos de retornos.
En tanto, las de salmónidos (salmón y trucha), fruta y vinos anotarían menores ventas por US$731 millones, impactadas por menor producción.
Sobrestock de vino de vendimia 2015
Un 30% menos de producción se habría registrado este año en la industria vitivinícola. Sin embargo, esos menores volúmenes podrían ser cubiertos por vino que se encuentra guardado. Esto, porque vendimias anteriores, como 2014 y 2015, dejaron sobrestocks en algunas bodegas, lo que podría ayudar a mitigar esta menor producción, explicó el presidente de Vinos de Chile, Mario Pablo Silva.
El economista proyectó que los retornos por envíos de vinos llegarían a US$1.800 este año, cifra muy similar, aunque levemente inferior a la del año pasado.
Los menores precios que está registrando el vino chileno podrían estar explicando esta baja. Sin embargo, Silva comenta que este negocio se debe ver en un plazo mayor. "En los últimos cinco años, las exportaciones han aumentado 14% en valor, impulsadas por un alza de 4% en volumen y 9,5% en el precio, especialmente por mayores ventas de vinos premium, sobre los US$40 la caja.
Ventas de salmónidos caerían por el "bloom de algas"
Cerca de un 17% menos de oferta de salmónidos -especialmente de la mayor especie de exportación de esta industria, salmón del Atlántico- se espera para 2016, producto del "bloom de algas" que remeció al sector en marzo, generando alta mortandad de peces.
Pese a los altos volúmenes de producción del año pasado, que rondaron las 800 mil toneladas, el menor precio del salmón chileno hizo caer fuertemente los envíos de este producto, totalizando retornos por US$3.520 millones, casi un quinto menos que en 2014. Haindl, estimó que este año no se recuperarán las exportaciones de salmones y truchas, las que alcanzarían sólo los US$ 3.400 millones.
El gerente general de SalmonChile, Felipe Manterola, aseguró que si bien el precio ha subido de manera importante desde diciembre a la fecha - cerca de US$2 por libra-, impulsado por una baja en la oferta en el mercado, el menor volumen producto del "bloom de algas" podría afectar.
Sin embargo, existen otros factores que podrían impactar al sector salmonero, como la crisis de Chiloé por la marea roja que acarrea menores ventas para la industria por más de US$100 millones. Manterola advirtió que esta situación podría tener un efecto directo en las exportaciones.
Uvas y manzanas lideran las pérdidas
El clima ha sido el peor enemigo del sector frutícola esta temporada. El economista de la UGM, proyectó que este año los retornos por exportaciones de fruta van a caer en US$583 millones.
El gerente general de Asoex, Miguel Canala-Echeverría describió que es muy difícil realizar pronósticos respecto de cómo concluirá la temporada. "Se debe tener presente que la producción exportable de fruta se afectó por efectos climáticos adversos producidos durante la primavera, sumado a las fuertes precipitaciones registradas hace algunas semanas, las que afectaron las últimas cosechas de uva de mesa y aquellas frutas que se encontraban en proceso de cosecha como las manzanas y los kiwis", dijo.
El presidente de Fedefruta, Ramón Achurra concordó con que el clima será el gran detonante de un año con menores envíos. El empresario agrícola agrega que si bien el dólar alto ayuda mucho a un sector exportador como la fruticultura, el tipo de cambio no logrará compensar la caída de la producción, generando de todas maneras menores retornos respecto a temporadas anteriores, donde el clima afectó menos las cosechas de frutas.