SANTIAGO.- ¿Podría imaginar que ya existe -y además fue creado por chilenos y único en el mundo- una especie de robot capaz de leer y rankear mil currículum en segundos; aplicar tests psicométricos; realizar entrevistas a distancia; y evaluar las respuestas y actitud de los candidatos?
Y aunque sea difícil de creer, Gonzalo Sanzana, Agustín Almonte y la holandesa Hester Borm, de la compañía especializada en Recursos Humanos HR4ALL, lo hicieron realidad a través de AIRA, un asistente virtual de inteligencia artificial que mantiene los procesos de selección de manera rápida, barata y objetiva, "dando un trato justo y amigable a los postulantes".
"Nos preguntamos cómo podíamos hacer el proceso de la industria de servicios, que es seleccionar a mucha gente, de forma más fácil, y justo estaba este tema de los robots y empezamos a construir algo más inteligente que pudiera solucionar el problema de raíz y no entregarte una solución parcial, un test por una parte o una entrevista en video por otra, sino que un solo asistente virtual pudiera solucionar esto de principio a fin", cuenta Sanzana.
"(Hicimos un robot) porque hoy se necesita mucha mayor productividad en algunos sectores, hay tareas que son más repetitivas, como el proceso de selección de personas que son muy estándar entonces es muy moldeable", añade.
¿Cómo funciona? El robot aprende en base a algoritmos para calificar cuáles curriculum son "buenos" o "malos" dependendiendo de las habilidades que tiene la persona que se necesita. Luego forma una base de palabras claves (keywords) y los que contengan estas palabras los filtra y les asigna un puntaje. Finalmente escoge tres de ellos y los envía a quienes tienen la labor de elegir a los nuevos trabajadores.
Gonzalo Sanzana:
"AIRA sólo necesita 2 clicks para realizar su trabajo, uno para mostrarle la oferta de trabajo que deseas publicar y otro para validar los postulantes que ha seleccionado
También realiza entrevistas por video y procesa los tipos de expresiones que una persona transmite (positivas, negativas, nivel de expresividad facial, atención) "con tal de asegurarse que los potenciales trabajadores tengan un buen trato con los clientes que atienda".
En Chile trabajan con Cencosud y Kidscare (empresa para contratar niñeras) y hace poco partieron en México con una aseguradora y planean expandirse por toda Latinoamérica.
"Partimos en enero, hace muy poquito. En marzo teníamos el producto definido y las empresas se empezaron a acercar muy rápido porque en el fondo les resuelve un problema muy grande. Uno de nuestros prospectos de clientes tiene tiendas en todo Chile y tiene que contratar un psicólogo para que haga este proceso en cada región, entonces en realidad, lo que puede hacer, es acelerar todo ese proceso y después pasarle la terna final al psicólogo, pero no necesariamente tener que repetir ese proceso en cada lugar", comenta el ingeniero.
Una muestra de su potencial se refleja en la invitación que sus fundadores recibieron para presentarle el software a la mayor aceleradora del mundo, Y Combinator, en Silicon Valley, EE.UU., para evaluar la posibilidad de que los financie.
"El resultado fue que nos dieron feedback para mejorar y tratar de incorporarnos en el siguiente llamado, pero es súper potente porque llegamos al top 7% a nivel mundial, y la competencia nunca ha sido ganada por chilenos. No llegamos a la final, pero de todas formas tiene un mérito muy grande", dice.
¿Reemplaza a los psicólogos?
Frecuentemente son estos profesionales quienes realizan la labor de afirmar quién es la persona adecuada para cierto puesto de trabajo, sin embargo, en la compañía se han planteado si la sociedad en general podría pensar que las máquinas van a pasar a reemplazar al Hombre.
Respecto a esto, Sanzana explica que "si se mira la historia hacia atrás, los procesos que fueron muy reiterativos se fueron siempre automatizando, como en las plantas de producción, de ensamblaje de piezas y la gente al final se fue concentrando en hacer, por ejemplo, mejores diseños, lo mismo pasa con el tema de los psicólogos los cuales tienen muchas más responsabilidades que seleccionar, esa es sólo una fracción de esas responsabilidades, entonces ellos tienen que agregar mucho más valor".
"El objetivo no es quitarle el trabajo a la gente, sino hacer más eficiente un proceso para que puedan abocarse en otras tareas de mayor calificación", subraya.