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ESTAMBUL.- Los inversores extreman sus recelos hacia Turquía. La Bolsa de Estambul registra caídas en la sesión entorno al 5%. El índice XU 100 pierde la barrera de los 80.000 puntos y reduce las subidas acumuladas en el año.
La renta variable turca despertó el interés de los inversores internacionales gracias al rally que se anotó tanto en 2012 como en
2014, dos ejercicios en los que brilló como una de las bolsas más revalorizadas a nivel mundial.
Los descensos se generalizan en sectores como el financiero. El segundo mayor banco del país, Garanti Bank, controlado por BBVA, cotiza con descensos próximos al 8%.
Los clubes de fútbol registran caídas más severas. Las acciones del Galatasaray, del Besiktas, del Trabzonspor y del Fenerbahce agravan sus pérdidas por encima incluso del 10%.
Los ajustes de carteras de los inversores también alcanzan a la deuda pública de Turquía. El interés exigido al bono a dos años se acerca al 9%, mientras que la rentabilidad de sus títulos a diez años roza el 9,5%.
Las turbulencias agitan la cotización de la lira turca. La divisa reaccionó el pasado viernes con un desplome de hasta el 5% a las noticias del intento de golpe de Estado.
