SANTIAGO.- En medio del debate sobre el lento crecimiento de la economía, el Fondo Monetario Internacional (FMI) subió por primera tras cuatro recortes consecutivos, su previsión para el alza del PIB este 2016.
Según el informe Perspectivas para Latinoamérica y el Caribe, la entidad subió "ligeramente" del 1,5% proyectado en abril, hasta un 1,7%. Sin embargo, pese a esta leve revisión al alza, para el próximo año el organismo internacional prevé que la economía chilena crecerá 2%, frente al 2,1% proyectado hace tres meses.
"Las perspectivas de crecimiento de Chile se revisaron ligeramente al alza, a 1,7 por ciento en 2016, ya que el ímpetu al inicio del año fue más fuerte de lo previsto", reza el informe presentado por Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional.
Pese a lo anterior, el FMI considera que "las perspectivas de inversión siguen siendo débiles, debido a que los precios más bajos e inciertos del cobre están frenando la inversión minera, y la floja demanda externa y las incertidumbres relacionadas con un cumplimiento incompleto del programa de reformas están retrasando la inversión en sectores distintos de la minería".
No obstante, destaca que "en general, la distensión monetaria y un marco fiscal creíble han ayudado a amortiguar el impacto de los precios más bajos del cobre y la floja demanda mundial".
Proyección regional
En general el pronóstico para la región para este 2016 se mantuvo. Por ejemplo, Brasil se contraerá 3,3% este año, menos que lo previsto anteriormente, y en 2017 anotaría un crecimiento de 0,5%. Mientras que los otros países que registrarán contracciones en su PIB para este año son Argentina (-1,5%) y Venezuela (-10%).
Por el lado contrario, las naciones que anotarán crecimiento de sus economías en este 2016, aparecen Colombia (2,5%) y Perú (3,7%).
Con todo, Sudamérica anotaría una contracción de 1,9% este 2016, mientras que el próximo año crecería 1%.
"Tras un comienzo difícil a principios de año, las condiciones tanto externas como internas en América Latina han mejorado. Pero las perspectivas para la región son todavía inciertas", afirma el documento.