Canary Wharf, distrito financiero de Londres.
EFE
LONDRES.- El Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido creció un 0,5% en el tercer trimestre del año, más de lo esperado, pese al voto favorable al Brexit en el referéndum del pasado 23 de junio, según un análisis preliminar difundido hoy por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).
El crecimiento en el trimestre de julio a septiembre es inferior al de los tres meses precedentes, que fue del 0,7%, pero supera las expectativas de los analistas, que habían predicho un 0,3%.
En términos interanuales, el PIB británico creció un 2,3% en el periodo, comparado con el tercer trimestre de 2015.
El PIB se vio impulsado en los tres meses posteriores a la consulta, en la que los británicos votaron a favor del Brexit, la salida de la Unión Europea (UE), por el buen rendimiento del sector clave de los servicios, que aportan un 78% a la economía nacional.
En especial, obtuvieron buenos resultados el sector de cines, con el estreno en julio de Ghostbusters, Jason Bourne, The BFG y Star Trek Beyond, y las industrias de transporte, almacenamiento y comunicación, precisó la ONS.
Al presentar el primero de sus tres cálculos estadísticos sobre la evolución del producto interior bruto, el organismo sostuvo que "la pauta de crecimiento sigue sin verse en general afectada por el referéndum sobre la UE".
La Oficina señaló que "el buen rendimiento del sector de los servicios ha compensado las caídas en otros sectores".
En el trimestre de julio a septiembre, el sector servicios creció un 0,8%, en contraste con la caída en otros tres importantes grupos económicos: la construcción, que bajó un 1,4% -su mayor descenso desde 2012-, la agricultura, que cedió un 0,7%, y la producción industrial, que descendió un 0,4%.
Estos datos podrían cambiar cuando la ONS presente en unos meses su cálculo definitivo correspondiente al trimestre, que incorporará toda la información disponible de los sectores productivos.
Tras el voto favorable al Brexit en el plebiscito, el Banco de Inglaterra ha introducido medidas para estimular la economía, como más financiación para los bancos y una rebaja de los tipos de interés hasta el actual mínimo histórico del 0,25 %.
Por su parte, el ministro de Economía, Philip Hammond, ha eliminado el objetivo del anterior Gobierno conservador de eliminar el déficit presupuestario en 2019-20 y ha indicado que, en cambio, prevé aumentar la inversión pública a partir de 2017.