SANTIAGO.- Un estudio realizado por la consultora internacional PwC analizó la participación de los jóvenes de entre 20 y 24 años en el mercado laboral y educativo de los 35 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en el cual Chile ocupó el lugar 25.
Los resultados arrojaron que si todos los países del bloque disminuyeran las cifras de jóvenes que no tienen empleo, educación o formación (NEET, Not in Employment, Education or Training, por sus siglas en inglés) al nivel de Alemania, la OCDE podría tener una ganancia económica de más de US$ 1,15 billón (millón de millones) en el largo plazo.
En el caso de Chile, si se disminuye la cifra de jóvenes que no estudian ni trabajan al nivel de Alemania, el Producto Interno Bruto (PIB) del país podría crecer en un 3,7% adicional en el largo plazo. Los “nini” representan un 14% de los jóvenes de entre 15 y 29 años, y de los cuales el 72% son mujeres, según los datos de la Casen 2013.
El ranking de los países con mayor empleabilidad para ese tramo etario lo encabeza Suiza, Alemania y Austria. A ellos les sigue Islandia, Noruega y Dinamarca. En tanto, EE.UU. quedó en el puesto 10 y con ello vuelve después de una década a estar entre los primeros lugares.
Cierran la lista las economías del sur de Europa, España, Grecia e Italia, que se han visto complicadas porque les ha costado repuntar desde la crisis financiera global de 2008-2009.
¿Cómo mejorar las cifras?
Según John Hawksworth, economista líder de PwC y coautor del estudio, Alemania ha logrado reducir sus cifras gracias a tres temas. El primero tiene que ver con un aprendizaje educacional dual, que incorpora la formación profesional al aprendizaje en el aula y que proporciona a los jóvenes más opciones en su transición al mundo del trabajo.
En segundo lugar está el cambio en las percepciones de los empleadores sobre la juventud y el fomento de participación temprana en las escuelas para mejorar la empleabilidad y el compromiso de los jóvenes.
Y en tercer lugar está la reducción de los métodos informales de contratación y el uso de calificaciones para ayudar a eliminar las barreras socioeconómicas.
Carol Stubbings, líder global de personas y organización de PwC, asegura que los jóvenes pueden hacer una contribución significativa a la fuerza de trabajo global, pero que "para aprovechar todo el potencial de esta generación, las empresas deben asegurarse de que están adaptando sus organizaciones para atraer y retener a nuevos y jóvenes talentos".