Actual Consejo del Banco Central conformado por Pablo García, Sebastián Claro, Rodrigo Vergara, Joaquín Vial y Mario Marcel.
El Mercurio
SANTIAGO.- Desde el 11 de diciembre queda vacante un puesto en el Consejo del Banco Central, luego de que ayer el actual presidente de la entidad confirmara que no continuará como consejero una vez que deje su cargo.
Aunque suenan algunos nombres, desde La Moneda no han anunciado quién es la persona idónea que se sumará a este grupo de cinco economistas que toma las decisiones de política monetaria, de regulación financiera y cambiaria en el país.
Cada integrante es designado por la Presidenta de la República y ratificado por el Senado, para ocupar el cargo por un periodo de 10 años. En caso de respetarse la tradición de mantener a economistas afines a distintos sectores políticos, esta vez correspondería que llegara un profesional de tendencia de centro-derecha.
Según Guillermo Le Fort, miembro del Grupo de Política Monetaria (GPM) de la Universidad de Chile -organismo que entrega su visión externa al Banco Central en estos temas- quien se integre al Consejo debe ser una o un "macroeconomista con una muy sólida formación académica, con algún récord de publicaciones y con experiencia en docencia en esos temas".
En cuanto a la carrera profesional, Le Fort comenta que debe tener "experiencia práctica relacionada con política monetaria, política financiera, política macroeconómica en general y alguna experiencia en organismos internacionales".
"Además -especifica el economista- es bueno que los consejeros representen distintas sensibilidades, no desde el punto de vista político, que no me parece relevante, pero sí desde el punto de vista del papel que cree que deben jugar las políticas macroeconómicas y el rol del Estado", y pone de ejemplo que existan economistas keinesianos o de "expectativas racionales" para que exista "un equilibrio y variedad".
Carlos Budnevich -también miembro del GPM- agrega que es necesario que los consejeros "tuvieran experiencia relevante en la superintendencia o el Ministerio de Hacienda, o dentro del mismo Banco Central".
Además, destaca que "tiene que ser una persona validada por el mercado, que genere credibilidad, y que pueda relacionarse bien con los distintos actores con los que se relaciona el Banco Central en su quehacer normal".
También suma "que no sólo haya tenido experiencia en el sector público, sino que también una mezcla con el sector privado. Son visiones complementarias: centros de investigación, universidades, donde haya podido desarrollar, investigar y analizar temas con la macroeconomía, economía internacional y mercados financieros".
Ambos economistas coinciden que en Chile hay "una cantidad y calidad razonable de personas que cumplen" con este perfil.
Aunque no quisieron dar nombres en particular, afirmaron que las opciones que más han sonado -como la ex directora de Presupuestos de Sebastián Piñera, Rosanna Costa; o el director alterno de Clapes UC, Rodrigo Cerda; o el también miembro del GPM, Raphael Bergoing- "son todos muy competentes y que cumplen con los requisitos".
