SANTIAGO.- El directorio de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) ayer lunes a su nueva mesa directiva, la que será presidida por Ricardo Ariztía de Castro por los próximos dos años. Como primer vicepresidente fue electo José Antonio Galilea Vidaurre y como segundo vicepresidente Recaredo Ossa Balmaceda.
El resto de la mesa quedó conformada por José Miguel Stegmeier Schmidlin; Gastón Caminondo Vidal; María Inés Figari Barrera; Juan Sutil Servoin; Martín Arrau García-Huidobro; Aurelio Montes Baseden; Luis Schmidt Montes; Christian Arntz Mac-Evoy; Rodrigo Lavín Christoph; y Mario Pablo Silva.
En la oportunidad, quien reemplazará a Patricio Crespo, planteó que trabajará para fortalecer el rol de la agricultura en el desarrollo del país y en el posicionamiento de Chile en el mundo. "Queremos demostrar que la agricultura es mucho más que un simple número que exporta US$15 mil millones anuales. Que nuestra voz esté presente, aportando desde la experiencia y contribuyendo al crecimiento del país", destacó.
También planteó que concentrará esfuerzos "en fomentar la capacitación y productividad en beneficio de los trabajadores del sector así como también hacer realidad el Estatuto del Trabajador Agrícola que tiene que hacerse cargo de la permanente adaptabilidad que requiere el agro".
Junto con ello comentó que "el gremio continuará participando activamente en corregir la reforma al Código de Aguas a fin de resguardar la certeza jurídica y el patrimonio más preciado de un agricultor: el recurso hídrico".
Ariztía, además, sostuvo que trabajará porque se revitalice la preocupación por la violencia en regiones del sur, la que no cede y se ha radicalizado en los últimos años. "Queremos contribuir desde nuestra experiencia, pues sobre la base del diálogo y trabajo conjunto se pueden lograr grandes avances, soy testigo que el diálogo es posible", dijo.
En materia institucional, se comprometió a fortalecer la representación del gremio en regiones, profundizar los espacios de comunicación y buscar fórmulas que permitan dar mayor participación a medianos y pequeños agricultores. "Nuestro objetivo es aunar fuerzas y relevar el rol de la agricultura como motor de desarrollo en regiones y como una fuente de crecimiento y trabajo para miles de familias en Chile", concluyó.