SANTIAGO.- El listado de las ciudades más caras para vivir que entrega Mercer, volvió a situar a
Luanda, capital de Angola, en el primer lugar, desbancando a Hong Kong.
Pese a que el país es uno de los mayores productores de petróleo del mundo, se ubica entre las naciones más carentes del continente africano, con un PIB total a 2015 de US$102,6 mil millones, por detrás de países como Nigeria, Sudáfrica y Argelia, entre otros y un PIB per cápita de sólo US$4.102.
Con una población de poco más de 25 millones, el 7 de junio pasado, a través de un decreto presidencial, el Gobierno de la ex colonia portuguesa fijó el importe al salario mínimo garantizado en 16.500 kwanzas (US$98,5).
Sin embargo, si se quiere arrendar una cada de tres habitaciones sin amueblar, algo considerado "de lujo" en la capital, su precio mensual supera los US$12.200 y en el caso de un apartamento de dos habitaciones su valor excede los US$5.300 de renta.
Durante la guerra civil que desangró al país, la ciudad alcanzó una inflación del 1.000%, mientras que hoy, dicha cifra alcanza el 34,1% -menos que el 42% de 2016- y preocupa al Fondo Monetario Internacional.
¿Y por qué es tan cara?
La guerra civil vivida en Angola se inició en 1975 cuando el país obtuvo su independencia de Portugal y finalizó en 2002. Durante ese tiempo la mayor parte de la producción industrial y agrícola se detuvo y la infraestructura básica como carreteras, ferrocarriles, líneas eléctricas y de abastecimiento de agua sufrieron graves daños.
De hecho, sólo un 20% de la ciudad cuenta con servicio de saneamiento de agua y sólo el 30% de las viviendas tienen agua corriente.
Es por lo anterior que su capital, Luanda, se caracteriza por su alto costo si se quiere vivir "bien", ya que después de haber sido una vez un gran exportador de productos como el café y el algodón, y autosuficiente en la mayoría de los alimentos, Angola ahora importa aproximadamente el 80% de sus bienes de consumo y sigue enfrentando los desastres de la guerra.
En el ranking, Luanda volvió al primer puesto luego de tres años, ante un repunte en 2016 del petróleo a nivel mundial y ante un stock limitado de viviendas de lujo, pese a una alta demanda entre los extranjeros.
"Allá toda la industrilizacion esta muy vinculada al petróleo y, de por sí, es un lugar caro", comentó Agustina Bellido, Líder de Productos de Mercer.
La analista añadió que "es un lugar donde se gana buena cantidad de dinero pero la disponibilidad de bienes y servicios es baja".
"Entonces el estudio consiste en buscar los mismos productos o servicios en las ciudades que reportamos. Si buscamos el mismo whisky que en Santiago, en Luanda no es llegar y encontrarlo en el supermercado, hay mayor escasez y eso hace que suban los precios", sostuvo Bellido.
En el estudio 2017 participaron 209 ciudades al igual que en 2016. Las cifras de las comparaciones de costo de vida y costos de arriendo de vivienda de Mercer, surgen de una encuesta realizada en marzo de 2017, en la que se utilizaron los tipos de cambio de ese momento y la canasta internacional de bienes y servicios de Mercer como referencia para las mediciones.