SANTIAGO.- . La inversión en construcción cerraría 2017 con una caída de 1,8% en doce meses, mientras que en 2018 registraría un repunte de 2,4% anual, según dio a conocer esta mañana la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
Javier Hurtado, gerente de Estudios del gremio, explicó que "con estos resultados, 2017 será el tercer año consecutivo en que la inversión en construcción terminará con cifras negativas, lo que, al igual que en años anteriores, se explica por la menor inversión en infraestructura productiva, especialmente en infraestructura productiva privada".
Asimismo, sostuvo que, en promedio, "en 2017 el desempleo sectorial fue de 9,8% debido a la escasa renovación de proyectos y la baja actividad inmobiliaria privada". Para el 2018 se proyecta un menor desempleo, pues llegaría, en promedio, a 9,3%.
En lo que respecta a la inversión en infraestructura pública, para 2018, en tanto, se proyecta un crecimiento de la inversión anual en infraestructura pública de 2,2%, impulsado principalmente por inversiones en infraestructura sanitaria, lo que compensaría en gran medida la menor inversión real prevista en el presupuesto público para 2018.
En materia de concesiones, el flujo de inversión en 2018 llegaría a US$ 613 millones, disminución que se explica por la finalización de obras relevantes y una lenta incorporación de nuevos proyectos.
En cuanto a la inversión en infraestructura productiva privada, se estima que para 2018 se proyecta que la inversión en este subsector crecerá 2,8% anual. Si bien la inversión en proyectos de mayor tamaño alcanzaría los US$ 9.133 millones, de los cuales US$ 4.938 serían gasto en construcción, esto se compensaría con la ejecución de proyectos medianos y pequeños.
Subsector vivienda
En cuanto a la inversión en vivienda pública, para 2018 la CChC proyecta que la inversión en este subsector caerá nuevamente, esta vez en 2%, siempre por efecto de un menor presupuesto real.
Hurtado comentó que "estas bajas se dan en el contexto de al menos siete años consecutivos con una alta inversión en vivienda pública (post terremoto de 2010), por lo que las bajas son relativamente marginales". Para 2018, el mayor recorte presupuestario (13%) afectará al programa de sectores medios (DS 01).
Respecto de la inversión en vivienda privada, para el próximo año se proyecta un alza de 2,8% de la inversión anual en vivienda privada. "La recuperación de las expectativas, el mayor otorgamiento de permisos de edificación habitacional y el incremento del ingreso de nuevos proyectos inmobiliarios durante la segunda mitad de 2017 permiten anticipar un efecto positivo para este subsector", sostuvo el ejecutivo.