SANTIAGO.- Este viernes se realizará la cumbre del G20 en Buenos Aires -la primera que se realiza en Sudamérica-, hasta donde llegarán los líderes de los países más industrializados del mundo y algunos emergentes, para discutir temas de cooperación económica, financiera y política. Diversos analistas adelantan que será una de las citas más tensas en una década.
A diferencia de la APEC, que se desarrolló hace poco más de una semana en Papúa Nueva Guinea, la cita en la ciudad Argentina reunirá al Presidente de Estados Unidos Donald Trump y su homólogo de China Xi Jinping, en medio de las tensiones que ha generado la guerra comercial. También estarán presentes el Presidente de Rusia, Vladimir Putin y la canciller alemana, Angela Merkel.
A diez años de la primera cumbre de líderes del G20, celebrada en Washington en el contexto de la crisis financiera global de 2008, Argentina ha marcado como prioridades de la agenda de este año abordar el futuro del trabajo, la infraestructura para el desarrollo y un futuro alimentario sostenible, temas que se espera estén presentes en el documento final de la cita.
Sin embargo, se espera que los temas que dominen los debates sean otros asuntos de relevancia global e incómodos para muchos actores, como los compromisos sobre cambio climático y el sistema mundial de comercio, sacudido en los últimos meses por crecientes medidas proteccionistas.
Será en este contexto que Chile, a través del Presidente Sebastián Piñera, participe de la cumbre tras recibir la invitación del Mandatario trasandino Mauricio Macri.
Según adelanta el canciller Roberto Ampuero, la idea de la participación chilena en la cumbre es seguir alzando la voz en defensa del libre comercio y del multilateralismo, tal como se hizo en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico.
"¿Porque se escucha con respeto la opinión de Chile?, porque es un país que ha hecho un desarrollo considerable, reconocido, en los últimos 35-40 años en términos económicos, comerciales, modernización, de diversificación de exportaciones y porque es un país muy estable también en términos económicos, responsable en términos financieros, da garantías"
Canciller Ampuero
"Lo importante en el G20 es que los países ahí tiene la oportunidad de dar a conocer su voz, obviamente hay economías que son gigantescas, otras que son menores, pero cada uno de los que está invitado a participar en el G20, algunos por derecho propio y los que son invitados, son escuchados de la misma forma… y
Chile en ese sentido no tiene ninguna duda", sostiene el ministro de Relaciones Exteriores.
En ese sentido, manifiesta que "consciente de todo esto (los dos principales socios comerciales son China y Estados Unidos) y que queremos tener las mejores relaciones con ambas superpotencias, es que Chile plantea su voz y sin complejo, y lo plantea en términos de defensa de libre comercio y de defensa del multilateralismo, lo plantea en un sentido de que no tiene que ver de una cuestión ideológica, o teórica, tiene que ver con una experiencia como país".
El canciller añade que "el peso que uno pueda tener por su coherencia y por los resultados que ha alcanzado en integraciones y porque la ha buscado realmente. Y lo otro elemento muy importante es con el multilateralismo, nosotros no actuamos como llanero solitario, nosotros buscamos otros países con los cuales tenemos las mismas sensibilidades en ciertos temas y las empujamos en esa dirección".
En términos conceptuales de integración, el papel, el rol, la voz de Chile, siempre actúa en concordancia con otros países que tienen una percepción una visión semejante
Canciller Roberto Ampuero
Por último, explicó que la invitación de Chile tiene un efecto "y subrayo mucho eso, es un país que tiene mucho que decir, mucha experiencia que compartir, es un país que está volcado a lo que es libre comercio, a través de la Alianza del Pacífico, 36 tratados de libre comercio, tiene experiencia y resultados concretos en esto".