SANTIAGO.- Seis turistas brasileños murieron este miércoles en Santiago producto de una posible intoxicación de monóxido de carbono en el departamento que arrendaron a través de la aplicación de Airbnb.
Tras el hecho, la plataforma multinacional envió un comunicado en el cual declaró: "Lamentamos profundamente esta tragedia. Estamos siguiendo de cerca la situación y trabajando con urgencia para brindar apoyo a las familias de los huéspedes durante este momento tan difícil".
Así, y además de recalcar que "la seguridad de huéspedes y anfitriones es nuestra prioridad", la empresa consignó que "se han registrado más de 500 millones de llegadas de viajeros a espacios en Airbnb y los incidentes negativos son extremadamente raros".
"Incluso así trabajamos constantemente para mejorar la plataforma, nuestras políticas y nuestras medidas de protección porque incluso un accidente es demasiado".
Respecto a los factores que habría provocado la muerte de los cuatro adultos y dos menores, la firma sostuvo que "tenemos un programa que entrega detectores de humo y monóxido de carbono de manera gratuita a los anfitriones que lo soliciten".
"Todos los anfitriones deben certificar que siguen las leyes y regulaciones locales (...) Si un huésped reserva un espacio donde el anfitrión aún no reportó tener detectores de humo o monóxido de carbono, la plataforma Airbnb indicará esto al huésped para que estén al tanto y puedan tomar las precauciones necesarias".
Por último, Airbnb agregó: "Mientras que es imposible eliminar todos los riesgos a la hora de viajar, nuestro equipo global trabaja intensamente todos los días para colaborar con que nuestra comunidad tenga una experiencia positiva y segura".
Según información solicitada por Emol a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), el edificio no contaba con sello verde al día.