Por casi cinco meses consecutivos, los economistas brasileños recortaron sus pronósticos de crecimiento para el gigante latinoamericano en 2019. Así lo reveló una encuesta que realiza el Banco Central de Brasil, publicada este lunes, y que arrojó una nueva baja en las expectativas por decimonovena semana seguida.
Si bien el pronóstico de crecimiento promedio de este año se redujo a un nuevo mínimo del 0,82% desde el 0,85% de la semana anterior, las estimaciones de inflación, el tipo de cambio y las tasas de interés oficiales para este año hasta el 2022 se mantuvieron sin cambios.
Lo anterior, según consignó Reuters, "sugiere que lo peor podría ya haber pasado" para la actividad de Brasil, la cual se contrajo 0,2% durante el primer trimestre del año.
Así, los pronósticos promedio de alrededor de 100 instituciones financieras en la encuesta semanal Focus del Banco Central proporcionan una guía completa y en tiempo real de la confianza del mercado sobre la economía brasileña.
Así, después de los negativos datos de los primeros tres meses del año, los indicadores económicos recientes sugirieron que la economía probablemente se estancó, posiblemente incluso cayendo en una recesión, en el segundo trimestre.
Pero la última encuesta de Focus, publicada justo cuando la cámara baja del Congreso parecía estar cerca de aprobar una revisión ambiciosa del sistema de seguridad social de Brasil, apunta a la estabilización, al menos por el momento.
En promedio, los economistas consideran que la inflación finalizará este año en 3,80%, el dólar en 3,80 reales y la tasa de referencia Selic del banco central en 5,50%, sin cambios respecto a la encuesta anterior.
