SANTIAGO.- Se siguen sumando las voces al debate en torno a la reducción de la jornada laboral. Este miércoles, fue el turno del ex ministro de Energía de Michelle Bachelet, Máximo Pacheco; del ex ministro de Hacienda de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, Manuel Marfán; y del doctor en Economía Patricio Meller. Y si bien todos manifestaron diversas opiniones al respecto, hubo un claro punto de consenso: no se ha dado una buena discusión.
Así, en uno de los recesos del foro anual de Asimet, Máximo Pacheco abordó el tema y sostuvo que, en este debate, "a mí me llama la atención que cuando llegan estos momentos en los que hay que tomar decisiones, se impone la exageración, el griterío y se imponen dinámicas que son muy perversas para la conversación".
Y aseguró que "no hay ninguna duda de que reducir la jornada a 40 horas es favorable para la calidad de vida de la gente, para la economía, para el desarrollo y el bienestar de Chile". En ese sentido, consultado por si se refería al proyecto de Camila Vallejo o al del Gobierno -que busca rebajar la jornada a 41 horas-, el economista y empresario dijo que prefería no entrar en los detalles.
De todas formas, manifestó que "la dirección (de reducir la jornada) está bien encaminada. Vamos en esa dirección y lo que más importa es primero, fijar la dirección y, luego, ver los detalles. La dirección está fijada y bien fijada".
Respecto a cómo ha visto el actuar del Gobierno en la "batalla" que se ha dado con la propuesta del Partido Comunista, Pacheco disparó: "Yo veo muy mal al Gobierno. Lo veo confundido, lo veo enervado, lo veo sin capacidad para construir puentes".
"Los procesos de gestión de controversias son procesos que requieren, en primer lugar, perseverancia, buen uso del lenguaje, serenidad y paciencia. Y el Gobierno no parece estar mostrando eso", dijo agregando además que la iniciativa del empresariado, de presentar una nueva propuesta desde su vereda, "la veo como una iniciativa a la defensiva, tardía y no muy creíble, porque es más una reacción que una propuesta".
Poner la reducción de la jornada "a la cola" de la discusión país
El ex consejero del Banco Central y ex secretario de Estado del Gobierno de Frei Ruiz-Tagle, Manuel Marfán, calificó el actual debate que se ha estado dando en torno a la jornada de trabajo como "malo, muy malo" y sostuvo que "forma parte, una vez más, de la improvisación que existe en Chile, porque los temas se ven de a uno y no en conjunto".
Si bien el doctor en Economía de la Universidad de Yale declaró que "no me molesta la idea" de rebajar las horas, sí enfatizó que "me complica que se haga al mismo tiempo que están aumentando las cotizaciones previsionales, uno no puede hacer esas dos cosas al mismo tiempo", dijo en relación a la reforma de pensiones que se discute en el Congreso.
"Chile en algún momento va a tener que reducir la jornada, porque en Chile es alta, por eso yo tengo cierta simpatía (con la idea) (...) pero este es un tema populista. Tiene sus méritos, pero hay que ver que se suma a los costos de otras cosas que están ocurriendo simultáneamente y que no está bien que se sumen. Yo sugeriría ponerlo (el debate) a la cola"
Manuel Marfán
Por eso, y ante las otras discusiones que están dándose en materia laboral, Marfán sugirió poner este debate en particular "a la cola" y subrayó: "Lo de la jornada es un tema particular que uno lo tiene que ver en un contexto de si es prioritario o no es prioritario respecto de otras cosas, pero esa es la discusión que no tenemos y que ha estado ausente en el Estado siendo que todos los países desarrollados este tipo de cosas las piensan con anticipación antes de actuar".
Por su parte, el doctor en Economía de la Universidad de California, Patricio Meller, criticó el protagonismo que ha tomado la discusión de "las 40 horas" en el país. "Es una discusión fuera de este mundo", opinó. "Esto revela cuánto estamos aislados de lo que se esta discutiendo en el mundo. Aquí todos los debates que tenemos son internos, son provincianos, creemos que el mundo se acaba en Chile".
Y remató: "Creo que estamos discutiendo las cosas equivocadas y si queremos llegar a ser un país desarrollado, entonces empecemos a tener debate con contenido como los que hay en los países desarrollados".