SANTIAGO.- La
relicitación de la carretera Talca-Chillán, proyecto por US$796 millones, se iba a convertir en la
primera obra en concesionar bajo el alero del Fondo de Infraestructura (Foinsa). Pero esta aspiración del Ministerio de Obras Públicas (MOP) está hasta ahora
congelada por decisión de la Contraloría General de la República. En un dictamen la entidad indicó que
no tomaba razón de las bases de la licitación por dos motivos, uno porque
no advertía claridad en el modo de pagos o traspaso de activos al Fondo. Por otro lado aluden a que
los estatutos de Foinsa aún no entran al órgano contralor para su toma de razón.
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