El Banco Central presentó su último
Informe de Política Monetaria (IPoM) del año, en donde dio cuenta de una negativo panorama para los principales indicadores de la economía para este y el próximo año.
En su reporte, el instituto emisor, además de presentar una serie de proyecciones, entre ellas un PIB para 2019 de 1% y para 2020 de entre 0,5% y 1,5%, también afrontó de manera clara el impacto que ha tenido la crisis social en el andar de la actividad económica.
Recesión técnica
La entidad sostuvo que "si la inversión se resiente más allá de lo contemplado, por ejemplo, si se postergan los grandes proyectos del sector minero y/o la inversión habitacional sufre un ajuste más pronunciado, se podría observar un aumento aún mayor del desempleo y un crecimiento cercano a los valores inferiores del rango proyectado".
Lo anterior, de acuerdo al análisis del Central, aumentaría "la posibilidad de atravesar por una recesión -dos trimestres consecutivos con una variación trimestral negativa del PIB- durante 2020".
Desempleo
En el escenario base, el instituto emisor indicó que "de mantenerse la relación histórica entre la demanda de trabajo y la actividad, y de no producirse cambios significativos por el lado de la oferta, la tasa de desempleo podría superar el 10% a inicios del 2020. Por el lado de los ingresos laborales, la información cualitativa da cuenta de una reducción, en particular de aquellos que reciben comisiones por ventas, de quienes cumplen turnos de trabajo que no pudieron realizarse y de quienes no pudieron hacer funcionar sus emprendimientos.
En ese sentido, añadió que "todo ello redundará en un consumidor más cauto en las decisiones de gasto".
Así, el componente de consumo habitual -bienes y servicios- también verá mermada su expansión. "Con ello, el consumo se expandirá 1,1% tanto el 2019 como el 2020. Solo una vez despejadas las incertidumbres retomará tasas de crecimiento más elevadas, por lo que el 2021 se expandirá 3,1%", señaló el Banco Central.
El escenario según las empresas: Crisis por seis meses
En el IPoM se constata que según la información recolectada por las empresas se "apunta a que el efecto de la crisis social en la actividad de noviembre podría ser relevante, y en algunos sectores mayor al de octubre. Hacia adelante, existe una relativa certeza que también afectará el desempeño en diciembre, existiendo además un porcentaje elevado de empresas que cree que el efecto se prolongará hasta por seis meses más".
Se ha documentado cómo la incertidumbre generalmente aumenta de forma abrupta ante eventos de conmoción similares a los registrados en Chile desde mitad de octubre
IPoM
Así, el informe expone que las empresas "mencionan efectos inmediatos en el empleo y que existe una visión mayoritaria que la dotación se reducirá en el 2020".
Asimismo, las compañías perciben un aumento de la incertidumbre respecto de la concreción de la inversión prevista para el próximo año.
En cuanto a las condiciones financieras, "se informan deterioros en la demanda de crédito, en particular respecto de las colocaciones de consumo, vivienda y comerciales. En cuanto a la oferta, los ajustes son menores en magnitud, mencionándose una mayor demora en la aprobación de solicitudes y mayores tasas de interés".
De todas formas, el BC indicó que "lo inusual del fenómeno que está afectando el desempeño de la economía dificulta la capacidad de prever la dirección y magnitud de sus efectos. La información que se vaya conociendo en las próximas semanas será especialmente relevante para aquilatar la relevancia de los cambios en el escenario macroeconómico y sus efectos en la evolución de la inflación en el mediano plazo".
Impacto de las protestas
Sobre este punto, el IPoM sostuvo que "el aumento de la incertidumbre derivada de disturbios sociales violentos afecta los mecanismos tradicionales a través de los que opera la política monetaria, por lo que puede reducir su efectividad. En situaciones como esta, otras herramientas de impulso macroeconómico, que incidan más directamente en la demanda agregada son más efectivas. Un ejemplo de ellas, es una política fiscal contracíclica, como la recientemente anunciada por el gobierno".
El informe completo a continuación