La rápida propagación que ha tenido el coronavirus en todo el mundo ha afectado a gran parte de los sistemas de salud ante la falta de diversos insumos, situación que ha llevado a diversas empresas a colaborar con la crisis.
Por lo mismo, muchas han decidido cambiar su producción y centrarse en la fabricación de diferentes productos que ayuden a combatir esta crisis sanitaria en Chile y el mundo.
Algunas de estas comenzaron la fabricación de mascarillas, mientras que otras se centraron en el mercado de desinfectantes de manos.
Lo que decidió CMPC
En el caso de CMPC, a través de su filial de productos de higiene y cuidado personal Softys, anunció la compra de dos máquinas de fabricación automatizada de mascarillas del tipo quirúrgicas, las cuales serán instaladas en las plantas ubicadas en Puente Alto.
Cada máquina alcanza una capacidad de producción de 1 millón 500 mil mascarillas al mes y serán transportadas a sus respectivos destinos por vía aérea, de forma de acelerar el proceso e iniciar la fabricación de estas en un plazo de 30 días más.
"No estamos abordando este desafío como un negocio, sino como la respuesta que se espera de una compañía orientada al cuidado de las personas, tal como lo hacemos con nuestros productos de higiene y cuidado personal", señaló el gerente general de Softys, Gonzalo Darraidou.
"Por lo mismo, nuestra intención en el actual contexto es distribuir estas mascarillas de manera totalmente gratuita a través de los servicios públicos de salud", agregó Darraidou.
Cabe mencionar que la nueva línea de producción de mascarillas de Puente Alto, tendrá una capacidad de entre 60 y 80 mascarillas por minuto.
El caso de Cervecería AB InBev
La Cervecería AB InBev informó que donará más de 70.000 unidades de alcohol gel antibacterial para contribuir y hacer frente a la crisis que se vive por el coronavirus.
La mayoría de estas unidades será destinada a los organismos públicos de salud a través de una alianza con la Central Nacional de Abastecimiento del Sistema de Servicios de Salud (Cenabast).
A su vez, la empresa anunció que un porcentaje de ellas también será entregado a los puntos de venta y a los colaboradores de la compañía, con el fin de asegurar la salud de los trabajadores.
La iniciativa forma parte de la acción global de la compañía, a través de la cual están produciendo más de 800.000 unidades de gel antibacterial, las que están siendo donadas a varios países de Latinoamérica y el mundo.
Las pymes también se han reconvertido
No solo las empresas han sido las que se han reinventado, sino que también las pymes han decidio cambiar su producción.
Es el caso de Olegario Bustamante, dueño del local "El baratillo", de la zona de San Javier. Antes de que ocurriera esto, Olegario se dedicaba a la venta de ropa americana, bolsos y mochilas. Sin embargo, con la situación que se vive hoy decidió reinventarse.
Es así como en conversación con Emol, afirmó que "deje de lado eso (mi negocio) porque no se estaba vendiendo nada, así que un día pensando me puse a reciclar la ropa clínica, como esa es 100% algodón, hacerla en mascarillas".
"Llevo como 2 semanas en esto. Ahora estoy fabricando como 100 mascarillas al día y estoy vendiendo al detalle". Además, añadió que "las vendo a $1.000 cada una".
Mascarillas de Caffarena?
La empresa Caffarena decidió fabricar sus propias mascarillas para hacer frente a esta crisis sanitaria. En un principio hacían 3.000 de estos productos al día, sin embargo, ya están llegando a fabricar 30.000 cada 24 horas.
La gerente general de la empresa, Victoria Izurieta, afirmó en entrevista con LUN que "en un principio eran 20 personas encargadas de confeccionar las mascarillas. Luego, tuvimos que mover gente de distintos sectores, a las que le hicimos la asesoría necesaria para poder tejer las mascarillas".
"Pasamos a gente de empaque, bodega e incluso ventas por la demanda", agregó Izurieta.
Asimismo, señalaron que un porcentaje de la producción de mascarillas que esta está realizando la empresa será donado a los hospitales.
La idea de CCU
La empresa también se unió a estas iniciativas y a través del mercado de sus cervezas sin alcohol buscarán ayudar al sistema de salud.
El gerente general de CCU, Patricio Jottar, comentó a través de un comunicado que "ante la escasez de alcohol gel, hemos decidido utilizar el alcohol que es un subproducto del proceso productivo de nuestras cervezas sin alcohol, y ponerlo a disposición de esta difícil emergencia sanitaria por la que atraviesa el país y el mundo".
Asimismo, agregó que "utilizaremos ese alcohol para la elaboración nacional de alcohol gel, el cual será entregado al Ministerio de Salud y también para proteger la salud de las personas en nuestros centros de trabajo".
El alcohol gel será dispuesto en envases de 500 ml y se estima que, en una primera fase, la producción nacional alcanzará a 100.000 unidades, lo que equivale a 50 mil litros, que comenzarán a ser donados durante la próxima semana al Ministerio de Salud.
La producción de Bacardí
La compañía anunció que va a producir 1,1 millones de litros de desinfectantes de manos y esto debido a que la demanda mundial continúa excediendo la oferta en esfuerzos para reducir el riesgo de covid-19.
A su vez, esta semana, ocho sitios de fabricación de propiedad de Bacardí en los Estados Unidos, México, Francia, Inglaterra, Italia y Escocia se unieron al anuncio de la semana pasada de que Bacardí Puerto Rico suministraría alcohol para hacer desinfectantes para manos.
Bacardí está desviando su poder de producción global, recursos y procesos para suministrar el alcohol esencial que tanto se necesita para aumentar la producción de desinfectantes para manos, señaló la empresa en un comunicado.
