Una semana antes de que se cumpliera la fecha límite establecida como plazo legal, el Presidente Sebastián Piñera dio a conocer la noche de este jueves el proyecto de Ley de Presupuestos 2022.
Se trata de uno de los erarios más relevantes del último tiempo, dado que es el último elaborado por el Mandatario y deberá ser ejecutado por la administración que resulte electa en los comicios presidenciales de noviembre y en una eventual segunda vuelta.
El erario fiscal incluye un gasto total de
US$82.135 millones, lo cual, si bien significa un crecimiento de 3,7% respecto al Presupuesto aprobado por el Congreso para 2021,
lo cierto es que implica una reducción del 22,5% comparado con el extraordinario gasto ejecutado este año,
Según el proyecto, esto permitirá reducir el déficit fiscal desde un 11,5% en 2021 a 3,9% del PIB el próximo año.
Todo esto,en el marco de las advertencias, tanto de expertos como de autoridades económicas, respecto a la necesidad de comenzar a retirar los estímulos fiscales que se inyectaron a raíz de la crisis gatillada por el covid-19, a fin de aplicar una contracción del gasto.
Macarena García, economista senior del centro de estudios Libertad y Desarrollo, destacó el hecho de que "era absolutamente necesario partir en esta Ley de Presupuestos con el retiro de estímulos, no dejarlo hacia más adelante, porque el estímulo es demasiado grande en el 2021, por lo tanto, no haber empezado en el 2022 iba a traer consecuencias fiscales muy serias".
"Se rescata también que Hacienda planteó la toda la Ley de Presupuestos para poder mantener el 3,9% de déficit estructural, que es en el fondo el ancla (…) porque siendo que es una Ley de Presupuestos que viene con una restricción importante de gastos, también viene con un cambio de la orientación del gasto hacia partidas que debieran ayudar a la reactivación, al empleo.
Osea se hace cargo también de la situación particular de que todavía no recuperamos completamente la actividad económica", agregó.
En esa línea, resaltó que el nuevo erario fiscal "conjuga bien la expansión económica que hoy estamos viendo con una restricción de gasto y una reorientación del Presupuesto hacia las cosas que faltan".
Respecto a las posibles carencias o temáticas que no aborda la propuesta fiscal del Ejecutivo, García apuntó que "una de las cosas que a uno siempre le gustaría ver más es la reorientación presupuestaria (…) uno tiene claro que en ciertas cosas el Gobierno no es tan eficiente como a uno le gustaría, y uno esperaría ver que alguien en algún momento se hiciera cargo de esta reasignación, porque al final no es menor gasto, sino que es un gasto mejor".
"Siendo que es una Ley de Presupuestos que viene con una restricción importante de gastos, también viene con un cambio de la orientación del gasto hacia partidas que debieran ayudar a la reactivación, al empleo. Osea se hace cargo también de la situación particular de que todavía no recuperamos completamente la actividad económica"
Macarena García, economista de LyD
Con todo, dijo que "se echa de menos (la reasignación), pero se entiende que puede quedar un poco en segundo plano dado la tremenda tarea que viene, de efectivamente, contener el gasto".
Por otro lado, Tomás Rau, director del Instituto de Economía de la Universidad Católica, subrayó que "el proyecto de Ley de Presupuestos 2022 es realista en el sentido de que el aumento excepcional del gasto público por la pandemia no es sostenible como lo han indicado el Consejo Fiscal Autónomo (CFA), transversalmente casi todos los expertos. El recorte en el gasto de un 22,5% puede ser algo brusco pero necesario para reducir el déficit y normalizar".
Y continuó diciendo que "es un recorte necesario y con todo, el Presupuesto quedará unos US$9 mil millones por sobre el nivel que tenía antes de la pandemia y un 3,7% arriba que la Ley de Presupuesto de 2020, sin considerar las ayudas extraordinarias que se decidieron después".
Asimismo, advirtió que "el crecimiento de la economía de 2022, de entre 1,5-2% según Informe de Política Monetaria (IPoM) de septiembre, no será suficiente para financiar el aumento del gasto público (3,7%), lo cual acrecentará las necesidades de financiamiento fiscal".
Luego, detalló que "otro aspecto positivo es que mantiene las ayudas para seguir reactivando el empleo. Si bien la actividad económica supera los niveles pre-pandemia, aún falta recuperar entre 500 y 800 mil puestos de trabajo según la encuesta que se tome".
Así y todo, expresó: "hay que ver bien la bajada de este proyecto de ley, sabemos los ejes prioritarios y algunos incrementos", pero dijo que "en varios ejes la información es muy general".
"Por ejemplo, se echa de menos algo más concreto en tema de ciencia e investigación. Está el eje 'Educación de calidad y ciencia para el futuro' pero solo sabemos el titular, esto es bien sensible si consideramos que en el último presupuesto se recortaron los fondos de investigación y en Chile sólo el 0,4% del PIB", agregó.
Mientras que
Rodrigo Montero, decano de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma, afirmó que
"sin duda es un Presupuesto sensato, honesto que pone de relieve la necesidad de retomar un crecimiento sostenible para el futuro y dejando muy en claro que el año 2021 fue un paréntesis, que era necesario para poder atender las necesidades que muchas familias tenían en vista de los efectos que originó la pandemia".
El ex gerente de estudios de la Dirección de Presupuestos (Dipres), también abordó que en el proyecto de ley actual "se está proponiendo un incremento de la inversión de 8,1%, y también importantes recursos para los programas pro empleo, por lo tanto, es un Presupuesto que apunta básicamente a consolidar la recuperación económica y a apuntalar al sector económico real".
Junto con lo anterior, sostuvo que "es un Presupuesto bastante prudente y que se hace cargo del mensaje que emanó desde el Consejo Fiscal Autónomo (CFA)".
Las posturas de los gremios
Desde el mundo empresarial y productivo también hicieron notar sus impresiones sobre el proyecto de Ley de Presupuestos 2022, que fue ingresado la tarde del jueves al Congreso por el ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda, quien además indicó que espera que la iniciativa se despache previo al inicio del campaña de segunda vuelta presidencial.
Así, Ricardo Mewes, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC), comentó que "siendo está una de las planificaciones presupuestarias más difíciles del último tiempo, valoramos que se dedique un capítulo al control de la pandemia, ya que debido a lo que ha sufrido nuestro sector es importante que se consideren los elementos que permitan al comercio, los servicios y el turismo continuar funcionando, mientras termina de controlarse el coronavirus".
"El proyecto de Ley de Presupuestos 2022 es realista en el sentido de que el aumento excepcional del gasto público por la pandemia no es sostenible como lo han indicado el Consejo Fiscal Autónomo (CFA), transversalmente casi todos los expertos. El recorte en el gasto de un 22,5% puede ser algo brusco pero necesario para reducir el déficit y normalizar"
Tomás Rau, director Instituto de Economía UC
Junto con ello, remarcó el que "se haya privilegiado en su elaboración la recuperación de los equilibrios fiscales impulsando la reactivación económica y la creación de empleos e incentivando la inversión, algo que como Cámara hemos venido alertando hace algún tiempo. Asimismo, celebramos que las regiones reciban un incremento de un 5% en los recursos".
Sin embargo, Mewes reparó en que "nos hubiera parecido apropiado haber incorporado al turismo como una prioridad en el presupuesto, dado que ha sido el sector más golpeado por la pandemia y que aún no puede reactivarse por completo".
Quien no se manifestó conforme con la propuesta del Gobierno fue Juan Pablo Swett, presidente de la Multigremial Nacional, quien aseguró que se trata de "un anuncio poco profundo en materia de pymes y emprendimiento, y tampoco se hace cargo de los niveles de deuda pública que tenemos hoy en día, ya que pese al anuncio, la disminución del déficit fiscal es absolutamente insuficiente considerando la deuda pública que tiene el Estado chileno y los niveles de intereses que estamos pagando".
"Finalmente no consideró, a nuestro juicio, los niveles de sobrecalentamiento actual que tiene nuestra economía y los problemas que ello traerá a futro en términos de inflación y crecimiento", agregó.
Por su parte, desde el sector minero,
Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional Minera (Sonami), apuntó: "Vemos un presupuesto realista, considerando la situación fiscal del país, y la necesidad de continuar impulsando la reactivación de la economía, afectada por la pandemia y la crisis social".
Tras ello afirmó que "consideramos que lo relevante en esta materia es que la inversión se ejecute y se haga eficientemente, con el claro propósito de reactivar la economía y generar empleo".
"Adicionalmente, vemos con satisfacción el esfuerzo en orden a disminuir el déficit estructural, desde 11,5% a 3,9%, lo que tiene el claro propósito de avanzar en la recuperación de los equilibrios fiscales y macroeconómicos", concluyó.
Finalmente, Antonio Errázuriz, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), apuntó que "en principio, el Presupuesto parece consistente con la difícil situación fiscal por la que atraviesa nuestro país y también respondería a los desafíos de impulsar la creación de empleo y reactivar la inversión, aunque con la información disponible es muy difícil proyectar si este Presupuesto será suficiente como para elevar los niveles de la economía más allá de lo señalado por el Banco Central para 2022".
En todo caso, aclaró que "parece destacable que el Presidente haya mencionado que el incremento de la inversión se concentrará, por ejemplo, en vivienda y obras públicas, dado el déficit habitacional que existe y el positivo impacto que los proyectos de infraestructura tienen en la calidad de vida de las personas y en la competitividad del país".