El próximo 7 de agosto asumirá Gustavo Petro como nuevo presidente de Colombia y será el primer mandatario con orientación ideológica de izquierda en ese país. En este contexto cabe preguntarse si cambiará la relación comercial con Chile.
El ex guerrillero y economista colombiano viene a liderar el poder Ejecutivo del país cafetero. Todo esto, en medio de un escenario económico asediado por diversos fenómenos mundiales, como los efectos de la pandemia, la guerra entre Rusia y Ucrania y las alzas de tasas de interés en una cantidad significativa alrededor del mundo.
Hay que tener en cuenta que el país sustenta su economía principalmente en la industria de la agricultura. Colombia es de los mayores productores de café, aceite de palma, caña de azúcar, palta, cacao, entre otros, en todo el mundo.
Según la ficha país de indicadores macroeconómicos de la Subsecretaría de Relaciones Económicas de Colombia (SUBREI), Gustavo Petro llega a una Colombia que cerró el año pasado con un crecimiento económico de 7,6%. Sin embargo, para este 2022 las proyecciones del ingreso son bien diferentes: se visualiza un PIB que caerá a la mitad, con una expansión de 3,8 puntos aproximadamente.
Aún así, de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el crecimiento del PIB en el primer trimestre de 2022 marcó un 8,5%.
En términos de productividad, el Jefe de Estado electo quiere tener a Colombia con ingresos de alrededor de 5 puntos del PIB por año.
Además, según cifras del Banco Central, Gustavo Petro llegará a una economía con un IPC que en el pasado mayo varió mensualmente 0,84%, para alcanzar el 9,07% de inflación total anual. La tasa de política monetaria ha escalado a un 6% en ese país.
Asimismo, el desempleo alcanzó un 11,2% en abril de 2022, de acuerdo a los indicadores del DANE.
El próximo mandatario colombiano ha explicado que su programa será caracterizado por la responsabilidad y la gradualidad. Además, ya manifestó su afán de realizar una transición a una economía más ecológica, que podría alterar el orden de la productividad, y el número de importaciones y exportaciones que Colombia hace a todo los países con los que sostiene una relación comercial, entre ellos Chile.
En 2021, el intercambio comercial entre Chile y Colombia cerró el año con la cifra de US$2.089 millones. Este, creció en promedio 6,3% por año, según cifras de la SUBREI.
Las múltiples ofertas y demandas de los diversos productos que Chile y Colombia intercambia entre sí podría variar de acuerdo a cómo va operando su Gobierno.
Según una ficha país de la SUBREI, en 2021 Chile cerró el año con "alambre de cobre refinado, con la mayor dimensión de la sección transversal superior a 6 mm, pero inferior o igual a 9,5 mm", como principal fuente de exportación hacia el país cafetero.
En el mismo año, lo que más exportó Colombia hacia Chile fue "hulla bituminosa, incluso pulverizadas, pero sin aglomerar, para uso térmico", producto que podría ser uno diferente en el cierre de 2022. Esto, probablemente, con la transición que quiere hacer Gustavo Petro a una productividad más en armonía con el medio ambiente.