Los mercados en Argentina acusaron este lunes recibo del cambio de mando en el Ministerio de Economía con una súbita escalada en las diversas cotizaciones del dólar estadounidenses, un derrumbe en los bonos soberanos y bajadas generalizadas de las acciones.
La intempestiva renuncia presentada el pasado sábado por Martín Guzmán como ministro de Economía, en medio de crecientes tensiones en el seno de la coalición gobernante, y su reemplazo por Silvina Batakis, una economista de perfil heterodoxo, acrecentó la incertidumbre entre los inversores sobre el rumbo que tomará de ahora en más, la segunda economía suramericana.
Las dudas y temores no son nuevos: hace semanas que los mercados muestran en Argentina un comportamiento cuanto menos tenso, en particular en las alicaídas cotizaciones de los bonos en moneda local, y también en la plaza cambiaria, donde la semana pasada el precio del dólar ya había llegado a niveles récord ante las nuevas restricciones al acceso a divisas dictadas por el Banco Central.
Batakis, quien asumirá su cargo en la tarde de este lunes, aún no definió su equipo de colaboradores ni dio definiciones públicas sobre las medidas que piensa adoptar.
Sólo hablaron algunos referentes del Gobierno de Alberto Fernández y se difundió un breve comunicado del Banco Central, en ambos casos ratificando el rumbo económico acordado en marzo con el Fondo Monetario Internacional y las políticas que venía aplicando Guzmán.
No bastó para despejar las dudas de los inversores, que optaron por deshacer posiciones en activos argentinos y buscar cobertura en el dólar.
"La reacción de los operadores locales resulta negativa, ya que, tras una vertiginosa danza de nombres y continuos ruidos durante todo el fin de semana, el rumbo económico que se estaría validando desde la política no resultaría de tono amigable"
Gustavo Ber, economista titular de Estudio Ber
"La reacción de los operadores locales resulta negativa, ya que, tras una vertiginosa danza de nombres y continuos ruidos durante todo el fin de semana, el rumbo económico que se estaría validando desde la política no resultaría de tono amigable", observó Gustavo Ber, economista titular de Estudio Ber.
Nuevo récord para el dólar
En el mercado oficial de cambio de divisas, el precio del dólar estadounidense subió 1,25 pesos en el estatal Banco Nación, donde cerró en un nuevo máximo de 125,50 pesos para la compra y de 131,50 pesos para la venta al público.
En el mercado mayorista subió 50 centavos, a un máximo de 125,95 pesos por unidad para la venta.
Por su parte, la cotización de la moneda estadounidense en el mercado informal saltó 28 pesos, a un nuevo récord de 267 pesos por unidad para la venta.
También los denominados dólares financieros operaron este lunes con importantes correcciones al alza. El dólar "contado con liquidación" (CCL, que consiste en comprar localmente con pesos argentinos acciones o bonos y venderlos en dólares en Wall Street) avanzó 10,2%, hasta un nuevo máximo de 278 pesos por unidad.
"Calmar a los inversores resulta urgente ya que sino se podría retroalimentar el circulo vicioso de tensiones cambiarias e inflación, lo cual impacta negativamente sobre la economía", sostuvo Ber.
Bonos y acciones en rojo
En el mercado de bonos, los títulos públicos argentinos registraban este lunes caídas de entre el 7 y el 10 %.
En tanto, en el mercado de renta variable, el índice S&P Merval de las acciones líderes de la Bolsa de Buenos Aires bajaba un 0,77 %, con retrocesos generalizados, aunque moderando las caídas respecto al bajón del 3 % en la apertura de la rueda.
Dado que este lunes es festivo en Estados Unidos, hay expectativa por saber cómo se comportarán este martes bonos y acciones argentinas en la plaza de Nueva York.
Por el festivo, tampoco ha habido corrección en el índice de riesgo país de Argentina, que cerró el viernes en 2.374 puntos básicos.
Jura nueva ministra
Batakis presentó esta tarde juramento como nueva ministra de Economía de Argentina, quien tiene en el horizonte grandes desafíos para la economía de su país, asediada por múltiples desequilibrios en materia fiscal, monetaria y cambiaria y tensiones políticas que alimentan la incertidumbre en los mercados y en el empresariado.
Fernández dio un cálido abrazo a la nueva ministra, pero no habló en el acto, al que asistieron funcionarios del Gobierno, representantes sindicales y empresariales.