EMOLTV

Paralelo entre las intervenciones de 2019 y 2022: Contexto e hitos que llevaron al Banco Central a actuar por dólar

Este lunes comienza a operar el robusto programa por hasta US$25 mil millones anunciado la semana pasada por el instituto emisor, una iniciativa más agresiva aún que la aplicada tras la extrema volatilidad del tipo de cambio generada por el estallido social.

18 de Julio de 2022 | 11:33 | Redactado por Tomás Molina J., Emol

  • 2019

    El 21 de octubre de 2019, en sus primeras operaciones tras el estallido social, el dólar se disparó $15 -en ese entonces, su mayor alza diaria en 8 años-. Ese día cerró en $727 y comenzó con ello un volatilidad sin precedentes, de la mano de la escalada de protestas y la agudización de la fractura social y política en el país, mientras que en el plano internacional la entonces guerra comercial entre China y Estados Unidos lo presionaban aún más.

    Un hito llegó el 12 de noviembre de 2019, cuando escaló $21,20, en medio de días marcados por el anuncio del Gobierno de Sebastián Piñera respecto a su intención de avanzar hacia una nueva Constitución. Ese día, el dólar anotó un nuevo máximo histórico, rompiendo un récord que no había sido batido en 11 años y llegando a los $795.

    Un día después, por primera vez en la historia, el dólar en Chile rompió la barrera de los $800. Tras ello, el Banco Central -entonces presidido por Mario Marcel- comenzó a levantar la voz, anunciando medidas para aumentar la liquidez del sistema financiero. Esto, sumado al histórico acuerdo por una nueva Constitución del 15 noviembre, entregaron un respiro momentáneo a la divisa estadounidense.

    Sin embargo, al correr los días el tipo de cambio retomó con fuerzas las alzas y parecía no tener techo. Desde el inicio del estallido social y el 25 de noviembre de 2019 registraba un estrepitoso avance de $117, llegando a los $829 -marca que fue superada recién en diciembre de 2021, tras la elección presidencial en la que triunfó Gabriel Boric-.


    La intervención
    Esa misma jornada de noviembre de 2019, a eso de las 18.00 horas, el Banco Central decidió reaccionar en serio y anunció una intervención cambiaria, una medida completamente excepcional ante la extrema volatilidad que estaba mostrando el dólar producto de la convulsión social.

    Anunció un programa por US$20 mil millones que se extendería desde el 2 de diciembre de 2019 hasta el 29 de mayo de 2020, casi seis meses. Ello, "ante los acontecimientos ocurridos en nuestro país en las últimas semanas que han afectado el normal funcionamiento de la economía. Esta situación se ha acentuado en lo más reciente por la prolongada tensión e incertidumbre", señaló el ente rector.

    Este programa consistía en una inyección gradual de dólares al mercado a través de dos modalidades: la venta de dólares spot por un monto de hasta US$10 mil millones y la venta de instrumentos de cobertura cambiaria por un monto de hasta US$10 mil millones.

    "Los efectos monetarios de esta medida serán esterilizados, de manera que la provisión de liquidez en pesos sea coherente con la tasa de política monetaria", acotó.

    ¿La reacción? Un fuerte retroceso de $20 en la sesión siguiente, pero manteniéndose por sobre los $800.

    Un nivel del cual nunca logró alejarse del todo, considerando que a inicios de 2020 el Banco Central decidió pausar el programa de intervención ante la influencia preponderante de factores externos -como el conflicto entre EE.UU. e Irán- sobre los movimientos del dólar. Con eso, sumado a la llegada de la pandemia de covid-19, una tensión social y política aún latente en el país y el debate constituyente, los $800 y más se consolidaron como una nueva normalidad para el precio del dólar en Chile.

  • 2022

    Si bien a lo largo de la pandemia de covid-19 y durante la seguidilla de elecciones en el país el dólar en el mercado chileno vivió frenéticos periodos, que llevaron incluso a una intervención verbal del Banco Central, nada fue similar a lo que comenzó a ocurrir en junio de este año, luego de que el dólar iniciara una fuerte escalada a nivel global, pero con especial impacto en Chile, siendo el peso nacional la moneda más devaluada del mundo a partir del sexto mes de 2022.

    Si hay una fecha en la cual apuntar el auge de esta debacle podría ser el 10 de junio de 2022, cuando Estados Unidos informó un fuerte salto inflacionario que lo llevó a registrar su mayor subida de precios a doce meses en 40 años. Con ello, comenzó a gestarse el pánico de los mercados por una posible recesión a nivel mundial y, el dólar, a dispararse, temores que se profundizaron días más tarde, cuando la Fed decidió iniciar una lucha más agresiva contra la inflación y anunció una histórica alza de tasas de interés.

    Un caso aparte ha sido el cobre, que producto también de los temores de una recesión mundial y el mal desempeño de la economía China -principal comprador de metales del mundo-, se ha ido a pique, dando un doble golpe al tipo de cambio en el plano local, ya resentido por incertidumbre interna en medio de la discusión constitucional. Todo esto, originó una tormenta perfecta que le quitó el techo al dólar y alimentó a los especuladores.

    El 17 de junio, un hito: el dólar alcanzó un nuevo máximo histórico al trepar hasta los $887, superando la marca registrada en diciembre tras el triunfo de Gabriel Boric en las elecciones presidenciales. De ahí en más, la escalada del billete verde quedó sin frenos.

    Rápidamente llegó a los $900 y así comenzaron a tomar fuerza las voces de economistas, analistas financieros y políticos que pedían acciones por parte del Banco Central, ahora presidido por Rosanna Costa. Pero, en un principio, la entidad optó por la inacción, argumentando que los movimientos del dólar estaban dentro de los fundamentos.

    En medio de ello, el pasado 24 de junio, Hacienda sorprendió al anunciar un programa de liquidación de activos del fisco en dólares por US$5 mil millones, lo que algunos analistas interpretaron como un intento de intervención cambiaria por parte la cartera, dando un respiro leve y breve al dólar, que luego retomaría las alzas con más fuerza aún, rompiendo récord tras récord y registrando su clímax el 6 de julio, cuando tocó por primera vez los $1.000.

    Hecho que llevó al Gobierno -en un actuar poco común- a pedir al Banco Central pronunciarse por la compleja situación cambiaria en el país, lo que por cierto generó críticas por sectores que acusaban una lesión a la autonomía del instituto emisor.

    Más allá de eso, al paso de pocos días, el Central tomó su primera ofensiva al publicar el lunes pasado un comunicado expresando su preocupación y asegurando que "de ser necesario" habrá medidas. Palabras que generaron nulo efecto, con un dólar que ya se instalaba sobre los $1.000. Luego y tras la reunión de julio culminada el miércoles, el Consejo del Central aplicó una agresiva alza a la tasa de interés y la fijó en 9,75%, lo que tampoco logró provocar el efecto bajista deseado sobre el billete verde.


    La intervención
    Así, el jueves 14 de julio, y luego de que el dólar llegara a los $1.046 -acumulando un explosivo avance de $202 desde el 10 de junio-, a eso de las 21.00 horas el instituto emisor, en un comunicado, expresó su decisión de intervenir el mercado cambiario, anunciando un robusto programa por US$25 mil millones.

    La iniciativa comenzó hoy y se extenderá el 30 de septiembre de este año -cerca de tres meses-, y contempla un plan de intervención cambiaria y provisión preventiva de liquidez en dólares. En ese sentido, considera la venta de dólares spot por un monto de US$10 mil millones y la venta de instrumentos de cobertura cambiaria por la misma cantidad. En cuanto a la provisión de liquidez, el organismo contempla ofrecer de forma preventiva un programa swap de divisas por un monto de hasta US$5.000 millones. "Este será complementado por un programa de liquidez en pesos a través de operaciones REPO por ventanilla en los mismos plazos"

    ¿La reacción? Histórica. Al cierre de la sesión de este viernes, el dólar se desplomó inéditos $76, cayendo hasta los $970.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?