Tras casi 60 semanas consecutivas de alzas, el pasado jueves vino la primera señal acorde con el pronóstico del ministro de Hacienda, Mario Marcel: las bencinas de 93 y 77 octanos dejaron de subir e, incluso, bajaron levemente. Y hoy llegó la primera caída importante.
La gasolina de 93 octanos descendió $10, mientas que la de 97 lo hizo en $5,6. Bajas influenciadas por la devaluación de los precios internacionales de los combustibles, y un tipo de cambio que muestra algo más de tranquilidad.
Así, frente a este panorama, expertos analizarón si es que las bencinas seguirán bajándo, durante cuánto tiempo y el efecto que esto trandía para calmar la fuerte inflación que golpea al país, con un nivel no visto en 30 años.
Luis González, coordinador económico de cambio climático, energía y medio ambiente de Clapes UC comentó a Emol que pese a que "esta semana la baja de la gasolina de 93 fue de $10 por litro, pudo haber sido mayor, porque el Mepco después de 58 semanas está recaudando - cobrando un impuesto - de $16 que se suman a lo que recauda el impuesto específico a los combustibles de $357 por litro".
Teniendo en consideración aquello, "se espera que al menos hasta fin de septiembre las gasolinas bajen de precio aproximándose a los $1.220". En cuanto al diesel, González, indicó que la situación es diferente "ya que faltan $141 para traspasar el subsidio y las bajas se esperan recién en octubre". De hecho, este jueves el precio del diésel creció en otros $10.
Sobre el efecto del precio de las gasolinas en la inflación, González expuso que "si consideramos el escenario que las gasolinas y diésel bajen un 5% esto provocaría un disminución de 0,17 puntos porcentuales en la inflación mensual de septiembre. Este es el efecto directo en el IPC de las gasolinas y con repercusión en los demás productos que usan como insumo a los combustibles".
Por su parte, Cristián Echeverría, director del Centro de Estudios en Economía y Negocios de Universidad del Desarrollo, indicó que "el precio de las bencinas debería tender a bajar en los próximo 6 meses, y en el rango entre los $250 y $300 porque los precios del petróleo a nivel internacional están bajando desde los máximos que alcanzó como resultado de la invasión Rusia-Ucrania".
"Desde ahí ha estado bajando sistemáticamente, producto del temor de una menor demanda mundial, y de la desaceleración mundial, así como de una apreciación del dólar, por la fuerte trayectoria de alza de tasas de interés que, con la información disponible hasta hoy, se anticipa que va a tener la reserva federal", añadió
"Esta caída sin duda va a contribuir a una baja en la inflación, principalmente por el componente de los volátiles que es tan fuerte, incluyendo la energía y los combustibles, que está por sobre el 20% anual, comparado con la inflación del IPC promedio que está en torno al 14%", dijo.
Por ello, continuó Echeverría, "si ese componente que ha pegado tan fuerte en el IPC baja también de forma sostenida significativa, sin duda, que va a poner una presión a la baja en la tasa de inflación".
Ahora bien, a ojos de la economista jefe de Dominus Capital, Michelle Labbé, "la incertidumbre continuará", ya que según ella, es "muy difícil de estimar una baja en los precios, ya que depende de los precios internacionales, si los precios internacionales siguen bajando efectivamente podremos tener bajas de bencina por más tiempo, pero también depende del tipo de cambio, y el tipo de cambio ha estado subiendo".
Respecto al impacto en la inflación, afirmó que "una o dos bajas no tendrán implicancias. Si hubieran bajas sustantivas, es decir de $10 por un mes, ya empezamos a ver efectos de 0,1, pero eso depende de qué es lo pase a nivel internacional y el tipo de cambio. Así como las incertidumbres internas y también de la reunión de la reserva federal el 21 y 22 de septiembre".
Mientras que el Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales estima una caída durante las próximas tres semanas para la gasolina de 93 octanos y dos semanas para la gasolina de 97. En tanto que el diesel debería aumentar durante las próxima seis semanas.
En ese sentido, Juan Ortiz, economista senior del Observatorio indicó que "una caída del precio de los combustibles de consumo vehicular es una buena noticia, debido a la incidencia de estos productos en la canasta del IPC. Específicamente la gasolina tiene una ponderación de 2.7% en la canasta del IPC".