La Superintendencia de Salud salió al paso tras los cuestionamiento por parte de las isapres respecto a la metodología de cálculo utilizada para el nuevo proceso de alza de planes.
Se trata de los resultados de verificación del ajuste de los planes correspondientes al proceso de adecuación 2022-2023, que tras el fallo de la Corte Suprema quedaron sin efecto, por lo que se abrió un nuevo plazo para que las isapres pudieran justificar las alzas respectivas, y por su parte, la Superintendencia de Salud corroborar estas modificaciones.
El documento emanado por la superintendencia permitió que cada isapre incrementara sus valores de la siguiente forma:
Colmena un 6,6%; Cruz Blanca un 4,3%; Vida Tres un 1,4%; Nueva Masvida un 7,6 %; Banmédica un 5,6%; y Consalud un 7,6%.
Desde la Asociación de Isapres calificaron el nuevo cálculo como "inexplicable" y que representa "un tercio del incremento real de gastos". Así, el gremio aseguró que implicará una merma por $94 mil millones.
"Socava el ya deteriorado funcionamiento del sistema y eleva la incertidumbre sobre su viabilidad, al impedir que las Isapres apliquen el reajuste necesario para mantener sus operaciones", sostuvo la asociación.
Ante esto, la superintendecia sostuvo que las seis isapres "conocían claramente cómo se realizaría el cálculo y además, tuvieron la posibilidad de presentar recursos de reposición o jerárquicos si no estaban de acuerdo con ésta y no lo hicieron".
Además, la entidad liderada por Víctor Torres expuso que "la verificación se realizó considerando la metodología utilizada para el Indicador de Costos de la Salud (ICSA) que es un promedio ponderado de la variación de costos del sistema de isapres, malamente, la Superintendencia de Salud podría haber contrastado, tal como las isapres pretendían, una metodología de cálculo entre variaciones de costos acumuladas con un indicador calculado como un promedio ponderado".
"Es necesario recordar que el proceso de adecuación o alza de precios base descansa en el análisis de cuestiones objetivas que no dependen del voluntarismo de esta superintendencia, que las isapres no pueden tener la pretensión que la adecuación se transforme en un salvataje para las isapres, en perjuicio de sus afiliados".
Superintendencia de Salud
En esa misma línea, se apuntó a las isapres de querer implementar "una metodología de cálculo con variaciones acumuladas desde el año 2020 a la fecha, que es lo que pretendían las isapres, era una forma de eludir el cumplimiento de la ley, permitiendo que éstas cobrarán a las personas afiliadas las alza que ya habían sido dejadas sin efecto por el Congreso durante la pandemia".
"No hubo ningún inexplicable cálculo", recalcó.
Finalmente, aseguraron que los emplazamientos "sin fundamentos" que han ocurrido los últimos días, no contribuyen ni facilitan el diálogo, "el que siempre debe darse dentro del marco legal y sin afectar arbitrariamente a las personas".
"Es necesario recordar que el proceso de adecuación o alza de precios base descansa en el análisis de cuestiones objetivas que no dependen del voluntarismo de esta superintendencia, que las isapres no pueden tener la pretensión que la adecuación se transforme en un salvataje para las isapres, en perjuicio de sus afiliados", concluyó.