La violenta jornada de ayer en el marco del tercer aniversario del 18 de Octubre, confirmó los peores temores que venían advirtiendo desde hace varios días diversos representantes del comercio en Chile. Por eso, no es de extrañar el negativo balance que hacen tras una nueva conmemoración del estallido social.
Manifiestan que los esfuerzos anunciados por la autoridad para reforzar la seguridad y entregar una mayor dotación de Carabineros en puntos estratégicos no fueron suficientes para evitar los saqueos y desmanes en diversos sectores de la capital y el país, generando múltiples destrozos y cuantiosas pérdidas económicas, además de aumentar el temor de quienes trabajan y viven en la denominada "zona cero".
"La jornada de ayer confirmó nuestros peores temores", sostuvo
Ricardo Meewes, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC). "Tenemos que lamentar nuevamente la vandalización de diversos comercios como supermercados y farmacias a lo largo de todo el país, donde una de las comunas más afectadas fue Puente Alto", añadió.
En ese sentido, subrayó que "la fiesta de la delincuencia se apoderó de las principales ciudades y hoy la farra la pagamos los ciudadanos y trabajadores honestos que debemos proteger nuestras fuentes de trabajo aún sin el apoyo de las autoridades, quienes entregan respaldo a Carabineros solo en el discurso".
"Desde el comercio creemos que se ha superado con creces el límite de lo aceptable. El 18-O no es más que una nueva fecha en que se institucionaliza la delincuencia y los saqueos", recalcó Mewes. Quien, además, realizó un "dramático" resumen de los eventos acontecidos.
"La zona cero vandalizada totalmente, intentos de saqueos en tres locales del barrio Lastarria, farmacias en diversos puntos de Santiago vandalizadas, seis robos frustrados a supermercados, un saqueo y un robo", dijo. "Durante la noche se registraron 22 personas detenidas por robos y saqueos a supermercados gracias a la rápida acción de Carabineros", añadió.
Por su parte, desde la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) expusieron los destrozos y saqueos ocurridos ayer afectaron "gravemente" a locales comerciales tanto en la capital como regiones, apuntando que los sectores de Plaza Baquedano, Bellavista y Puente Alto como los más afectados en Santiago, "con millonarias de pérdidas que aún están siendo contabilizadas".
"A ello se suman los cientos de comercios que debieron cerrar anticipadamente en forma preventiva, con el consecuente impacto económico que esta medida implica", agregó el gremio.
En ese sentido, la presidenta de la CCS, María Teresa Vial, comentó que "las autoridades dan cuenta de 15 saqueos, pero uno solo ya es un balance negativo. En los alrededores de las zonas de manifestaciones hay decenas de locales con distintos tipos de daños, desde rayados y ventanales rotos hasta pérdidas totales, que no han sido considerados".
"Las instituciones todavía están al debe y debe haber un control más eficaz, sobre todo unas penas más efectivas para aquellas personas que delinquen a placer y que se quieren encubrir en marchas pacíficas que ayer no existieron. Aquí hubo solo violencia y delincuencia".
Alfonso Molina
La dirigente gremial agregó que "los 150 eventos de alteración del orden público de los que dio cuenta el Gobierno generan cada uno de ellos daños a decenas de comercios que se ven obligados a cerrar, afectando a sus trabajadores, vecinos y consumidores, y que enfrentan además graves daños materiales en su infraestructura. Esto sin contar el daño a las ciudades que siguen deteriorándose cada vez que estas manifestaciones se permiten".
Mientras que el presidente del gremio de empresarios y emprendedores del Barrio Lastarria, Alfonso Molina, resaltó el perjuicio que generan estos hechos de violencia no solo al comercio, sino que a toda la comunidad que vive el sector de Lastarria "y los otros barrios patrimoniales que conformamos la Federación Nuestro Centro".
"Hubo saqueos, hechos delictuales de todo tipo, y lógicamente, el perjuicio económico también se ve traducido en que la gente tiene temor a visitar estos barrios. Eso tenemos que erradicarlo. Chile no se puede farrear lo escaso que tiene de patrimonio", manifestó.
Por último, aseguró que "las instituciones todavía están al debe y debe haber un control más eficaz, sobre todo unas penas más efectivas para aquellas personas que delinquen a placer y que se quieren encubrir en marchas pacíficas que ayer no existieron. Aquí hubo solo violencia y delincuencia".