Fernando Haddad se convertirá en el ministro de Hacienda de Brasil a partir del 1 de enero. Sin embargo, su anuncio ha despertado preocupación en el mercado, sobre todo por las ideas de este dirigente de izquierda.
Haddad tiene de 59 años y entre 2013 y 2017 fue alcalde de Sao Paulo, la ciudad más grande de Latinoamérica. Asimismo, con el apoyo de Lula da Silva - presidente electo de Brasil - fue candidato presidencial en 2018, cuando fue derrotado por el ultraderechista Jair Bolsonaro.
Días atrás, el posible nombramiento del profesor de Ciencias Políticas y ex ministro de Educación como jefe de la billetera fiscal, provocó caídas en la Bolsa paulista y subidas en la cotización del dólar.
En octubre del año pasado, Haddad aspiraba a ser gobernador de Sao Paulo, pero el bolsonarista Tarcisio de Freitas frustró su ambición en un balotaje (55%-45%). No obstante, Lula agradeció calurosamente el apoyo del ex alcalde. "La campaña de Haddad fue fundamental para que llegáramos hasta aquí", dijo el ex mandatario izquierdista (2003-2010) durante su discurso de victoria contra Bolsonaro en el balotaje del 30 de octubre que lo llevó nuevamente a la Presidencia.
Esto porque en Sao Paulo, el estado más rico y poblado, Lula superó las expectativas, con 45% del apoyo.
Hace cuatro años, Haddad, hijo de inmigrantes libaneses, fue designado candidato a presidente apenas tres semanas antes de las elecciones, luego de que Lula quedara inelegible debido a condenas por corrupción, anuladas más tarde. En las elecciones obtuvo 45% ante Bolsonaro, victorioso con 55%.
Es Abogado de formación, con un máster en Economía y doctor en Filosofía. Algunos lo caracterizan como sonriente, afable, de cabello castaño ligeramente canoso y cuidadosamente peinado, a veces se le apoda "Haddad tranquilao" (Haddad relajado) por su serenidad."No soy una persona ansiosa, espero que las cosas sucedan para tomar mis decisiones. Soy un ser político", dijo a finales de 2016 al diario español El País.
Haddad pasó la mayor parte de su carrera política bajo la sombra de Lula, quien lo nombró ministro de Educación en 2005. En 2012, este padre de dos hijos, casado desde hace 30 años con una dentista, tuvo un apoyo decisivo de Lula para convertirse en alcalde de Sao Paulo. Cuatro años después, fracasó al intentar la reelección, con solo 17% de los votos.
Ese año, el Partido de los Trabajadores sufrió una gran derrota en las elecciones municipales, meses después de la destitución de la presidenta Dilma Rousseff (2011-2016) por maquillar las cuentas públicas.
Haddad fue procesado por presunta corrupción durante su campaña de 2012, pero finalmente fue sobreseído en 2019.