La startup chilena SimpliRoute, puso en marcha un proyecto para entregar sellos verdes que certifiquen la eficiencia energética de la última milla de las empresas, esto con el propósito de hacer frente a la creciente demanda de despachos, sin perjudicar de sobremanera al medioambiente.
En los últimos tres años, el comercio electrónico en Chile vivió una expansión acelerada, al punto de que hoy representa más del 10% de las ventas totales de los comercios y cerca del 50% en los bienes durables. Sin embargo, el sector aún tiene camino por recorrer, ya que se estima que solo el 59% de las personas en Latinoamérica son compradores digitales, versus el 82% en Norteamérica, dato que augura un crecimiento sostenido en los años post recesión.
Ante ese escenario es que nace la iniciativa de la startup, que de acuerdo a Álvaro Echeverría, CEO de SimpliRoute, “la eficiencia es crucial para mejorar procesos tan críticos como la logística, pero la demanda por inmediatez muchas veces va en contra. La presión de los usuarios al comprar online puede llevar a las empresas a aumentar sus flotas, capital humano y kilómetros recorridos de forma explosiva, lo que en parte termina siendo perjudicial para todos”.
“Por eso, creemos que es importante impulsar un símbolo que reconozca a las empresas que buscan ser eficientes al despachar, integrando tecnología y planificación para no emitir CO2 de más”, remarca Echeverría.
El “sello verde de última milla” es una credencial que continuará desarrollando la empresa tecnológica chilena durante 2023, luego de sumar a una treintena de compañías medianas y grandes tales como Walmart, Avon y Kitchen Center Perú,entre otras. En ese contexto, se eligió enero para lanzar el piloto, así coincide con el Día Mundial de la Reducción de Carbono, que se celebra el día 28 del presente mes.
La idea de la startup, que esa distinción también se convierta en un diferenciador de cara a los clientes, licitaciones e iniciativas, dando muestra de que los despachos, desde que un camión se carga, programa su ruta, define el trazado óptimo y cumple con la entrega; ofrecen la menor cantidad de kilómetros recorridos necesarios y por ende, de bencina consumida. “Tanto el sello como un reporte de emisiones a cada empresa cerciorará que cada una cumple con los estándares de eficiencia logística, además de un detalle de los kilómetros recorridos y el CO2 emitido”, apuntan.
Según estimaciones de SimpliRoute, cerca de un 34% del total de kilómetros recorridos en despachos pueden ser optimizados (y por ende, ahorrados) si se integra tecnología en el proceso logísticos.
Con sus más de 400 clientes en Chile, solo en 2022 los vehículos integrados al software de la empresa recorrieron más de 193 millones de kilómetros. Y más de 610 millones de kilómetros en toda Latinoamérica. Por ende, estiman que al menos se evitó la emisión de unas 66.030 toneladas de CO2 a la atmósfera en toda la región.
El ejecutivo de SimpliRoute sostiene que “urge crear un distintivo a la responsabilidad de emisiones en logística, porque si bien ya existen sellos verdes que hablan del origen de la materia prima de productos, su fabricación o reutilización, no hay nada parecido para la última milla y los traslados corporativos”.
A su vez, Echeverría destaca: "Esperamos que de aquí a tres años este tipo de iniciativas sea un estándar en Latinoamérica y un ejemplo para otras zonas del mundo”.