La pugna al interior de la fila de pretendientes para hacer con Viva Air, la maltrecha aerolínea de bajo costo colombiana, se agudiza y tiene entre sus principales protagonistas a las aerolíneas Avianca, la chilena JetSmart y la gigante latinoamericana -de origen chileno- Latam.
La colombiana Viva Air cruza por una grave crisis financiera y está cerca de desaparecer, lo que es visto como una oportunidad para estos competidores. Así fue como se inició un truncado proceso de fusión con Avianca, pero luego llegó el interés de JetSmart para adquirir el 100% de sus acciones y, por último, apareció Latam, que en un comunicado de parte de su filial colombiana subrayó que "consideramos que esta potencial operación sería la mejor opción para fortalecer las condiciones de libre competencia".
También expuso que sería "la mejor opción para fortalecer las condiciones de libre competencia, así como ofrecer el respaldo necesario que permitirá responder a la situación financiera de Viva Air Colombia y sus acreedores, lo cual redundará en el fortalecimiento de la industria aérea colombiana".
Mientras que desde JetSmart también han recalcado que una posible adquisición de Viva fortalecerá la "libre competencia" manteniendo el modelo de ultra bajo costo en el mercado colombiano.
Según consignó El Pais de España, fuentes cercanas a Viva Air, compañía fundada en Medellín en 2009, alegan que el fantasma de la quiebra es latente. Por eso, agregan, hoy toda la atención está centrada en la celeridad de los órganos de control colombianos para dar vía libre a una de las ofertas y evitar el colapso.
De hecho, el pasado viernes Viva informó que se incorporó al mecanismo de salvavidas de recuperación empresarial aprobado por la legislación colombiana para hacer frente a la hemorragia financiera heredada por cientos de negocios tras la pandemia de covid-19.
La política de expansión del grupo aéreo Latam en Colombia, señala el comunicado de la chilena, aún está sujeto a un "análisis financiero", así como a un acuerdo "entre las partes y a las aprobaciones regulatorias correspondientes". Pero la noticia supone una señal de que la compañía, cuyo accionariado incluye a Qatar Airways y a la millonaria familia chilena Cueto, ha superado los golpes por la crisis sanitaria más aguda en un siglo
La historia por el apetito por Viva Air empezó en abril del año pasado, cuando Avianca emprendió un proceso de solicitud de fusión para rescatar a la "low cost". Ha sido una transacción salpicada por tropiezos. Primero fueron los errores procedimentales del encargado de velar por la libre competencia en el mercado aéreo, la Aeronáutica Civil. Más tarde irrumpieron las objeciones de la Superintendencia de Industria y Comercio con una investigación para esclarecer si la integración se llevó a cabo sin la aprobación del regulador.
Ocho aerolíneas, entre las que se cuentan Latam, la alemana Lufthansa o la española Air Europa, se han opuesto a la fusión entre las dos compañías de bandera colombiana por suponer una potencial amenaza al derecho a la libre competencia en el mercado local. Es una tesis refrendada por la Aeronáutica Civil en un primer veto emitido en noviembre del año pasado donde se apuntaba que la operación sumada de Avianca y Viva acapararía el 93,7% del tráfico doméstico.
Aquella resolución quedó anulada y a la espera de un nuevo pronunciamiento, al igual que en el caso de la Superintendencia de Industria y sus sospechas de que el acuerdo comercial entre Avianca y Viva ya se había consumado de manera irregular. Entre tanto, la plantilla de 1.250 empleados de Viva Air continúa a la espera de que alguno de los tres pretendientes reciba luz verde y obre el milagro de reflotar la operación conformada por una flota de 19 aeronaves y tremendas turbulencias en el horizonte.
Arremetida de Avianca
Avianca, por su parte, ha salido a criticar con dureza las intenciones de JetSmart y Latam. El principal operador del mercado aéreo de Colombia recalcó ayer que las propuestas de las chilenas con "inviables", dado que la firma está a la espera de la decisión de la Aeronáutica Civil respecto a la solicitud de integración con Viva.
"Las propuestas de los competidores que han manifestado su supuesto interés por Viva son, a todas luces, inviables, tardías y parecen más una distracción frente a la solicitud de integración de Avianca y Viva", indicó la aerolínea en un comunicado.
Según Avianca, ambas propuestas serían técnicamente inviables dado que "cualquier toma de control de Viva requeriría, una vez acordada la compra, procesos de aprobación de diversos países que tomarían un tiempo que la 'low cost' claramente no tiene".
"Por eso ponemos en tela de juicio la intención real de estas ofertas de actores que luego de oponerse a la integración por meses y negar la existencia de una crisis, hoy quieren aparecer como salvadores con soluciones que carecen de credibilidad".
La crisis por la que atraviesa Viva la ha llevado a cancelar algunas rutas dentro de Colombia, por lo que consideran que su integración con Avianca podría salvar su operación.
Avianca, a su vez, señaló que confía en la "respuesta oportuna de la autoridad ante el trámite de integración que se inició en agosto del año pasado, buscando que prime la conectividad de las regiones, la prestación del servicio del transporte aéreo y la preservación de empleos formales".