Actualmente, se conoce que la producción de jeans utiliza una gran cantidad de agua, energía y productos químicos, que no solo contribuyen a la contaminación de los recursos hídricos y del aire, sino que también afecta el estado de salud de las personas que trabajan en esa industria.
Otro dato sobre este material textil que se debe tomar en consideración, es que vida útil de esta prenda es de 8 años en promedio, pero en menos de 4 años son eliminados, llegando a vertederos, continuando su contaminación al liberar gases producto de su descomposición.
Frente a esta realidad, Claudia Ciudad, cofundó Domei, un emprendimiento que diseña calzado haciéndose cargo de los jeans en desuso, encontrados en vertederos, reutilizándolos y transformándolos en zapatos con diseño de autor que respetan la esencia del material.
Desde Domei indican que se aseguran de entregar productos de calidad, usando saldos de cueros, forros de badana y plantas de suela que nos permite asegurar un producto transpirable y durable. Además, intentan generar conciencia en el consumo, inspirando, educando y transformando a la comunidad en agentes de cambio.
La cofundadora, socia y directora creativa de la peculiar marca de calzado, quien es hija de un zapatero, comentó que “con esa intención surgió la idea de hacer zapatos. Inmediatamente, llamé a mi amigo Antonio, Ingeniero y también hijo de zapatero, para que me diera su opinión; le encantó la idea, y desde ese momento nació Domei”.
Los emprendedores de esta marca de calzado, además de aportar al cuidado del medio ambiente, se propusieron reivindicar el oficio del zapatero, ya que trabajan con maestros que cuentan con más de 40 años de experiencia priorizando el trabajo artesanal local. Sumado a lo anterior, la empresa se esfuerza para que sus proveedores y maestros reciban un pago justo por el servicio que les ofrecen, pagándoles un precio más alto que el promedio del mercado.
Por otro lado, Domei está comprometido con alargar la vida del material textil, dando una segunda vida a jeans, ahorrando agua y generación de Co2, ya que trabajan con un diseño que está basado en la moda lenta y circular.
¿Cómo trabajan?
La cofundadora del emprendimiento de zapatos, explica que cómo llegan los materiales a sus manos es un punto importante para la empresa. Claudia Ciudad comenta que "el 100% de los jeans que utilizamos provienen de donaciones de particulares, alianzas con fundaciones y la compra a pequeños comerciantes locales de segunda mano, el 90% del cuero utilizado es de retazos y saldos de cuero comprados a suelerias locales y marcas que han cerrado, el 100% de materiales para planta y plantillas, son comprados a pequeñas empresas locales y no compramos fardos de ropa".
En sí, además de vender un calzado sustentable, lo que este emprendimiento intenta es educar a la población a vestir de una manera más responsable entregando herramientas para generar un cambio en el consumo. “Nos preocupamos de no seguir produciendo desechos textiles, por ello nuestros diseños están pensados para aprovechar el material que utilizamos lo máximo posible y hacer este proceso más eficiente; produciendo a baja escala y a pedido”, afirma la directora creativa de Domei.
De hecho, esta marca entrega a sus clientes un servicio de reparación para alargar la vida de sus propios productos y poderlos seguir usando más tiempo, y si finalmente ya no se va a usar más el calzado, Domei recibe los zapatos y le entrega a su clientela un descuento del 5% para su próxima compra.
Ese producto que el cliente “desecha” la empresa lo reacondiciona y alarga su vida en dos formas: Los donan a una fundación con la cual tienen alianza o los venden como de segunda mano.
