El mundo empresarial estaba expectante a la segunda Cuenta Pública que realizó el Presidente Gabriel Boric, sobre todo por los anuncios en que los implica como actores y la hoja de ruta que se podía trazar para fortalecerlos ante el difícil escenario económico.
Sin embargo, si bien valoraron el tono y propuestas más específicas en seguridad, hubo una crítica transversal hacia el Mandatario por la "ausencia de medidas concretas en la reactivación económica y en pro al empleo".
Previo a dar su discurso, el Banco Central informó Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) de abril, señalando que la economía nacional retrocedió un duro 1,1% en el cuarto mes del año, sorprendiendo al mercado que esperada una caída en torno a 0,5%.
Ahora, a lo que sí le puso énfasis el Mandatario fue a la reforma tributaria, resaltándola como eje medular para llevar a cabo los proyectos y propuestas de su Gobierno. De hecho, anunció que un nuevo proyecto será ingresado al Senado en julio, y así insistir tras el rechazo que vivió el proyecto en marzo en la Cámara de Diputados, lo que significó un duro golpe a las aspiraciones del Ejecutivo.
Al respecto, la reciente presidenta de Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) Rosario Navarro, expresó que le preocupa la relevancia que le dio el Presidente a la reforma tributaria para llevar a cabo su programa, "porque si no crecemos, e hipotecamos el desarrollo futuro por una reforma actual buscando recaudación, es sumamente peligroso, así es que vamos a estar atentos y disponibles para aportar y recoger el guante del Presidente".
Eso sí, valoró "el tono y la disposición al cambio que mostró el Presidente en la Cuenta Pública y el énfasis que ha puesto su administración en materia de seguridad. Sin embargo, hemos echado de menos propuestas más robustas que reactiven la inversión y apuntalen la actividad económica, medidas que sean pro crecimiento y pro empleo".
También por reforma tributaria, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería de Chile (Sonami), Jorge Riesco, fue más crítico y advirtió que "nos parece que la insistencia en esa iniciativa representa un riesgo importante para lograr los objetivos planteados de aumento de inversiones y de mayor crecimiento económico".
Pese a ello, destacó "el compromiso del Presidente en cuanto a cuidar la economía y su reconocimiento de que la estabilidad es fundamental para que los chilenos y chilenas alcancen sus metas. En este sentido, esperamos que el Gobierno pueda llevar a cabo una hoja de ruta que precisamente propenda a esa estabilidad y un crecimiento sostenido".
Postura que también recogió Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), ya que consideró que ante este contexto, deber ser prioritario reactivar la economía y el crecimiento.
"En esta Cuenta Pública, hubo ausencia de iniciativas que incentiven la inversión y la generación de empleo. Ambos aspectos son esenciales para recuperar la senda del progreso", añadió.
Respecto al sector agrícola, Walker reprochó que "nos habría gustado escuchar anuncios para mejorar el financiamiento proveniente de Corfo y BancoEstado. Esto nos urge, ya que estamos enfrentando una grave falta de liquidez y capital de trabajo. No olvidemos que sin financiamiento, no hay inversión".
Por otra parte, el líder de la SNA valoró "que se haya abordado en profundidad la crisis de seguridad y orden público que afecta al país. Destacamos, especialmente, el aumento de los recursos para combatir el crimen organizado y el narcotráfico, y la pronta discusión del proyecto de ley que crea el Ministerio de Seguridad".
Dichos que también abordó Iván Marambio, presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), ya que consideró relevantes los anuncios para el mundo rural, con "la necesidad de fortalecer la descentralización junto, a la seguridad alimentaria. Pero complementaríamos lo dicho, con una mirada más integral y un enfoque especial en la agricultura, donde el trabajo conjunto entre el mundo privado y público sea un proceso clave y que se incentive".
Mientras que Jorge Welch, presidente de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), tuvo una dispar visión respecto al discurso, ya que por un lado consideró que "es positiva su disposición y apertura a reformular y buscar nuevos acuerdos políticos en la reforma previsional, confiamos también en la tributaria, de tal forma de cerrar este debate y dar certezas sobre las reglas del juego hacia adelante".
"También van en la dirección correcta el anuncio de incentivos a la contratación y la iniciativa para agilizar los trámites de los proyectos de inversión", complementó.
Sin embargo, el líder de Asecho criticó que "quedamos con gusto a poco respecto a medidas concretas y con plazos establecidos para recuperar la inversión y el crecimiento, una agenda con foco en la reactivación".
En tanto, José Pakomio, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC) evaluó positivamente la alusión del jefe de Estado sobre el "la mención a la digitalización de trámites junto con la ventanilla única, temas que de hecho ya llevan tiempo en carpeta".
Pese a ello, aseveró que "extrañamos que nada se haya dicho para combatir las altas tasas de informalidad que tanto afectan la economía, el empleo y las relaciones de la sociedad en general. No es posible condicionar acciones, en especial el tema de la seguridad, a la aprobación de una nueva reforma tributaria".
Por su parte, desde la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), manifestaron su desazón por "la nula referencia a cumplir esa meta impuesta por el Gobierno en 2022, y por la ausencia de medidas concretas y urgentes destinadas a reactivar la economía e incentivar la inversión, así como la creación de empleos de calidad que son los que otorga el sector productivo".
Su presidente, Dante Arrigoni, enfatizó en que esperaban "medidas destinadas a concretar la meta de aumentar en un 1,5% anual la productividad del país, ¿dónde quedó esa promesa? Nos gustaría saber si esa cifra ya no está dentro de los objetivos del Gobierno".
Asimismo, el dirigente gremial valoró las medidas que está impulsando el Gobierno en materia de seguridad y orden público, abogando porque tengan los resultados que espera no solo el sector empresarial sino toda la ciudadanía.
Gonzalo Uriarte, Presidente de Alimentos y Bebidas de Chile (AB) tuvo una dispar percepción de la Cuenta Pública ya que calificó como positiva "la apertura al diálogo, pero no vemos un cambio claro en las agendas. Nuestra economía sigue contrayéndose, como vimos en la última cifra de Imacec, y la verdad, es que como país no podemos esperar más. Necesitamos construir un camino claro, con foco en el bienestar de las personas y el desarrollo del país. Eso significa privilegiar el crecimiento y la inversión, no más impuestos".
Por último, Bernardo Larraín Matte, presidente de Pivotes, cuestionó que "mientras el ministro Marcel trataba a las afueras del Congreso de instalar el concepto de pacto fiscal, el Presidente en su discurso sólo insistió en una reforma tributaria recaudadora (...) Parece que el ministro Marcel no ha logrado convencer al Presidente de que el concepto de pacto fiscal también incluye otras dos patas tan fundamentales como ausentes del discurso presidencial".
"Me refiero a medidas precisas y concretas para cumplir con el imperativo ético de modernizar el Estado, así como medidas también precisas que incentiven el ahorro, la inversión y el crecimiento. No sólo el presidente perdió una oportunidad de oro para precisar medidas en ambos sentidos, sino que además retrocedió al agregar dos usos controversiales que no estaban en la reforma original: condonar el CAE y pagar la llamada deuda histórica de los profesores. Más que acercar posiciones, creo que las alejó", puntualizó.