El riesgo finalmente se concretó y Falabella perdió su grado de inversión. Ayer la agencia Fitch Ratings degradó la nota desde “BBB-“ a "BB+", dejando las perspectivas para la firma en “negativa”.
La rebaja se debe al "deterioro sostenido del perfil crediticio de la compañía, como lo demuestran los indicadores de apalancamiento que se esperan que tengan una tendencia por encima de los umbrales del grado de inversión", indicó Fitch.
Además, Fitch consideró que las iniciativas de la compañ+ia para mejorar su trayectoria de deuda son "insuficientes para mantener su calificación de grado de inversión".
Si bien Fitch reconoció un "enfoque proactivo de Falabella para la racionalización de la cartera de activos inmobiliarios y los esfuerzos por defender su perfil crediticio", ve riesgos en la ejecución de este plan de monetización de activos.
"La optimización de costos implementada requerida para estabilizar las operaciones es evidencia de la dislocación en el negocio y las continuas presiones de rentabilidad. Por lo tanto, la capacidad de Falabella para mantener su calificación 'BB+' no solo dependerá de la ejecución de este plan, sino también de un repunte operativo sostenido hasta 2025", dijo la agencia.
Asimismo, estimó que el endeudamiento de Falabella se mantendría en niveles altos en 2024 y 2025. Sin embargo, estas proyecciones no incluyen 2ninguna ejecución de plan de monetización de activos, ya que Fitch no tiene visibilidad sobre el momento o el monto que la compañía puede obtener de estas transacciones".
Fitch también proyectó una lenta recuperación del desempeño de la compañía, debido a una menor demanda en el retail, al estar más expuesta a formatos discrecionales.
Respuesta de Falabella
Ante esto, Falabella emitió un comunicado en el que sostuvo que su compromiso "es fortalecer la situación financiera de la compañía en el menor tiempo posible".
"Falabella ha tomado las medidas necesarias para tener una sólida posición de liquidez que le permite enfrentar todos los compromisos financieros con tranquilidad. Además, no enfrenta vencimientos relevantes de deuda el próximo año, y hoy tiene una sólida posición de caja. La decisión de la agencia se basa en el deterioro de la ratio de deuda financiera neta/EBITDA, producto de las presiones coyunturales que han impactado el indicador, respecto del cual Falabella ha reforzado su compromiso por mejorarlo". agregó.
Por su parte, el CFO de Falabella, Alejandro González, comentó que “tal como informamos en la presentación de resultados, estamos tomando todas las medidas para fortalecer nuestra posición financiera, dentro de lo cual el grado de inversión es parte integral, pensando en el crecimiento futuro de Falabella".
"Para ello continuaremos con nuestro plan que, entre otras acciones, incluye la monetización de activos inmobiliarios por entre US$800 a US$1.000 millones. Por otro lado, la focalización de la operación, más una normalización del entorno macro, nos permitirán incrementar la rentabilidad y seguir potenciando la relación con nuestros clientes, fortaleciendo la propuesta de valor de nuestro ecosistema de negocios”, cerró.
Transacción inmobiliaria en Perú
Por otra parte, la compañía informó que acoró con Mallplaza la firma de memorándum de entendimiento con el fin de evaluar la integración en Mallplaza de los activos inmobiliarios de Falabella Perú.
La transacción, para la cual las partes fijaron un plazo de hasta 120 días para negociar los términos y condiciones, permitiría que Mallplaza incorporara a su gestión los 11 centros comerciales de Open Plaza Perú, que representan 323.000 metros cuadrados adicionales, y adquiriría el 100% de Mallplaza Perú S.A. (sociedad en que actualmente es dueña del 33,3%).
Falabella, así, pasaría a operar en Perú bajo una única estructura inmobiliaria, en línea con la estrategia de la compañía de ser cada vez más simple y eficiente en su operación.