Tanto las clínicas como la Asociación de Isapres realizaron sus respectivas advertencias en la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, que inició la semana pasada la discusión de la ley corta de isapres que busca viabilizar el fallo de la Corte Suprema por tabla de factores.
Así, Gonzalo Arriagada, presidente de la Asociación de Isapres, y su par de la Clínicas de Chile, Javier Fuenzalida, realizaron balances y evidenciaron el impacto que está generando la crisis de las aseguradoras privados en el sistema de salud.
Isapres y los tiempos
Primero, Arriagada manifestó que "de no contar con esta ley corta, las isapres no tienen destino y podría ocurrir una crisis en el sistema de salud que obviamente queremos evitar".
Asimismo, el líder de las aseguradoras privadas instó a los parlamentarios a una pronta aprobación de la iniciativa. "La ley corta, como está definida en la actualidad, pudiera estar aprobándose en el mes de mayo, nosotros esperamos que así sea", acotó.
Esto, ya que -según explicó-, de ser visada en mayo, significa que las isapres deberían bajar los precios de los planes a sus afiliados en agosto ante el cambio de tabla. Y por consecuencia, proyectó que ocurriría lo mismo con el ajuste de cotizaciones fijadas al mínimo legal, así como con la aprobación de los planes de ajuste y pago que presenten las isapres en junio.
Entonces, dijo Arriagada, en el mes de agosto "lo que va a pasar es que va a haber una nueva baja de ingresos para las compañías, una nueva baja significativa. Estábamos bajo el agua, por decirlo así, y vamos a quedar más bajo el agua todavía".
Además, sostuvo que si el proyecto se aprueba en mayo, las aseguradoras recién van a estar iniciando el pago de excesos, y registrando un alza de ingresos, en noviembre de este año, pese a que tendrían que aplicar las bajas de precios en agosto.
Ante lo cual, en noviembre o diciembre van "a tener el ajuste necesario para reponer el equilibrio de las compañías".
Clínicas y nuevo diagnóstico
Por su parte, Fuenzalida actualizó el diagnóstico de los impactos entre los prestadores privados.
El líder de las clínicas expuso ante la instancia que la deuda total del al sector ascendía a $908 mil millones en el registro más actualizado al 31 de enero. Valor que es superior en un 20% a los $754 mil millones de inicios de 2022.
Frente a ello, sostuvo "actualmente registramos niveles históricos de deuda de parte de los aseguradores públicos y del sistema privado".
Y detalló que este último ítem es "la parte más crítica de esas obligaciones, no solo por monto sino también por su incremento".
Con todo, Fuenzalida notificó que la deuda de las aseguradoras se elevó a $636 mil millones al cierre del primer mes de 2024, cifra "que representa un 31% más que en enero de 2023".
En ese sentido, el presidente de las Clínicas de Chile subrayó que en el último año "las inversiones se han reducido en aproximadamente un 40%, según estiman algunos de nuestros asociados".
Y agregó que las instituciones de salud privadas han debido profundizar sus estrategias de ajuste. "Han debido acudir a financiamiento extraordinario en bancos por capital de trabajo", acotó.