A un mes de que los trabajadores del puerto de Coronel (Biobío) paralizaran su faenas y sin que haya acuerdo con la empresa, los sectores productivos que dependen de ese terminal marítimo han comenzado a evidenciar el impacto de la movilización en sus actividades. Así, la semana pasada los transportistas de cargo calcularon en un millón de dólares diarios las pérdidas al no poder movilizar mercadería desde y hacia ese puerto. Luego, la CPC y Corma pidieron a las autoridades "intervenir con mayor determinación" para garantizar un "retorno seguro y rápido de la actividad portuaria", recalcando el daño para la competitividad e imagen global de los puertos nacionales". El paro afecta principalmente al transporte de productos vinculados al agro y a la industria forestal.
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