El sistema frontal que azota al país desde Coquimbo a Ñuble traería perjuicios económicos en distintos frentes, según comienzan a prever analistas. Y es que, si bien aún es temprano para determinar exactamente cómo afectarán las lluvias, se esperan consecuencias sobre el Imacec y, eventualmente, alzas de precios en algunos cultivos, aunque desde el sector agrícola han manifestado que aquello es poco probable.
"Esta semana en Chile, con lluvias pronosticadas y un acumulado de 116 mm en la región central, el impacto en el Imacec de junio podría ser perjudicial", dice Sofia Schuster, investigadora Clapes UC, teniendo en cuenta que para el sexto mes del año, y antes de las lluvias, se esperaba una expansión económica en torno a 2%.
Agrega, para ilustrar lo que se podría esperar, que "según un informe del Banco Central de 2024, el efecto de las lluvias en el PIB es negativo, excepto para el sector de electricidad, agua y gestión de desechos". En principio, un efecto cuantificable es el que produce la paralización de las clases de los escolares en el Imacec, considerando que el paso que el sector educación tiene en el PIB es de 5,2%, según el instituto emisor.
En esa línea, dice también que "históricamente, el último Imacec reflejó una variación interanual influenciada por el sector de servicios y comercio, ambos vulnerables a cambios climáticos severos. Además de las posibles interrupciones directas en educación y transporte, y por lo tanto, efectos indirectos en los sectores de industria y comercio, en la generación eléctrica en zonas termoeléctricas se podría ver un impulso".
El economista senior de LyD, Tomás Flores, calculó -según consignó El Mercurio- que "la pérdida de dos días hábiles en servicios, como educación, ponderado por la zona afectada, implica una pérdida de entre 0,1 y 0,2 pp. en el Imacec de junio".
En tanto, el economista sénior del Observatorio del Contexto Económico de la U. Diego Portales, Juan Ortiz, estimó un menor Imacec en torno a 0,2% anual para junio. "Es decir, restará un crecimiento del Imacec de dicho mes, el cuyal igual debería registrar una variación positiva, solo que menor por el efecto de las lluvias", dijo.
Por otra parte, Schuster, de Clapes, advierte posibles efectos en los precios. "El sector agrícola podría enfrentar aumentos en costos de producción, potencialmente elevando la inflación. Seguimientos detallados serán clave para entender estos impactos".
Es precisamente en el sector agrícola en el que pone énfasis Nicolás Román, académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de los Andes.
Según explica, "el exceso de agua caída, tiene un efecto previsible de pérdida de cultivos de invierno. Dependiendo de la zona, habrá pérdidas de cultivos de cebollas, zanahorias y acelgas, por mencionar algunos, que debido al anegamiento de tierras, particularmente a orillas de ríos, registrarían pérdidas".
En esa línea, sostiene que "el efecto de la escasez relativa, será un aumento de precios en los meses de cosecha, de septiembre a diciembre, dependiendo del cultivo".
Así, puntualiza que "el efecto en la producción se reportaría en los meses de cosecha, al comprarlo con el año anterior, y debiera ser marginal, por el peso de estos cultivos en el producto nacional".
Dice, en cualquier caso, que "el efecto en la inflación pudiera ser algo mayor por el peso de las hortalizas en el IPC (1,4%), pero se acota si lo limitamos a aquellas trasplantadas o en almácigos en esta fecha. El efecto sería en los meses de cosecha, es decir, a partir de septiembre".
Dese del OCEC UDP, en tanto, la investigadora Carolina Molinare explica que "las lluvias tan intensas afectan en mayor medida la producción y cosecha de las hortalizas, las cuales se producen principalmente en la zona sur de nuestro país".
En ese contexto, agrega que "el efecto de estas lluvias podría generar un alza de 0,05 puntos porcentuales en la variación mensual de la inflación de junio, dada la relevancia que tienen estos productos en la canasta del IPC y toda vez que se espera un impacto importante en su produccion".
Cabe destacar que los agricultores ya han dado cuenta de los enormes daños que han sufrido. Hoy, sin ir más lejos, el Gobierno cifró en más de mil los agricultores afectados en el Biobío. Desde la Sociedad Nacional de Agricultura, en tanto, su presidente, Antonio Walker, hizo un llamado "a sacar financiamiento de emergencia para ponernos de pie".
Ahora bien, más tarde el mismo Walker sostuvo que los efectos del sistema frontal no deberían impactar los precios de los productos agrícolas. Misma impresión expuso el gremio Frutas de Chile (ex Asoex) respecto a la industria frutícola, afirmando que hasta el momento no habrían efectos negativos en la fruta, ya que, estaría prácticamente todo cosechado.
