Tras un intenso remezón, los futuros de acciones estadounidenses se estabilizaron el viernes después de pérdidas previas provocadas por la masiva caída en los sistemas informáticos que afectaron los viajes, el comercio y los servicios bancarios en todo el mundo.
Los contratos en el índice Nasdaq 100 y S&P 500 subieron un 0,1%.
La empresa de ciberseguridad Crowdstrike Inc. -responsable del apagón de Microsoft- bajó un 10% en las operaciones previas a la apertura del mercado, tras haber caído hasta un 21% después de advertir que su software estaba provocando fallos en los sistemas informáticos.
Su director ejecutivo dijo más tarde que se había identificado el problema y que "se estaba implementando una solución". Las acciones de Microsoft Corp, en tanto, caían 3,15%.
Las perturbaciones se producen hacia el final de una semana en la que el Nasdaq, con una gran presencia de empresas tecnológicas, ha perdido más del 3%, ya que los inversores se han retirado de las empresas de gran capitalización de alto vuelo y se han volcado a empresas más pequeñas. El índice Russell 2000 ha subido un 2,3% esta semana.
Las interrupciones tecnológicas no suelen causar daños prolongados en los mercados, dijo Rajeev De Mello, director de inversiones de Gama Asset Management, y agregó que los inversores podrían "aprovechar esas liquidaciones, especialmente en las operaciones de verano de menor liquidez y el viernes, para comprar riesgo".
"Sin embargo, la rotación del sector de renta variable ha sido brutal y podría continuar durante un tiempo más", añadió.
El índice Stoxx 600 de Europa cayó un 0,4% y se encamina a su quinto día de pérdidas. LSE Group Plc, que opera la bolsa de Londres, recuperó parte de las pérdidas en el precio de sus acciones provocadas después de que dijera que problemas técnicos impedían la publicación de noticias. Air France-KLM, Ryanair Holdings Plc y otras aerolíneas cotizaron a la baja debido a que algunos vuelos fueron suspendidos o retrasados.