Llegar a la etapa final de un proceso de selección y recibir una llamada negativa puede ser un golpe duro. Casi todas las personas enfrentan algún rechazo al buscar empleo, pero los expertos destacan la importancia de utilizar estas experiencias para aprender y desarrollarse profesionalmente, en lugar de obsesionarse con el resultado.
Según Juliana Naranjo, People & Culture consultant de Raven -compañía experta en transformación digital-, el rechazo durante una búsqueda de empleo, puede sentirse en principio como una pérdida, donde se experimentan emociones tales como desilusión, tristeza, frustración y duda al no “encajar”. Naranjo agregó que "el candidato debe confiar en sus habilidades y ser resiliente, continuar intentándolo, revisar regularmente su CV y adaptarlo a cada búsqueda específica".
Para la vocera de Raven es importante no tomarse nada personal, a veces las empresas rechazan personas por procesos internos, puede ser que la posición para la que el candidato aplicó ya no está abierta porque se perdió un cliente o internamente se decidió darle la oportunidad a otra persona con conocimientos del negocio. “La recomendación es ver cada situación como una oportunidad para mejorar”, mencionó Naranjo.
Baja autoestima y negatividad
Si la situación se alarga y, sobre todo, si amenaza a la subsistencia económica, también se puede caer en el bloqueo emocional. Para enfrentar estos sentimientos, Rodrigo Garay, Country Manager de Gi Group Holding -expertos en soluciones integradas de capital humano alrededor del mundo-, sugiere combatir la negatividad adoptando una actitud resiliente y proactiva.
A nivel emocional, el experto invitó a los candidatos que están en búsqueda de empleo, las siguientes prácticas:
Mantener una perspectiva positiva: El rechazo es una parte normal del proceso de búsqueda de empleo y no una reflexión sobre su valía personal.
Establecer metas realistas: Fijar metas diarias o semanales que sean alcanzables, por ejemplo: aplicar a un cierto número de empleos o conectar con un número “X” de nuevos contactos en la industria.
Cuidar de sí mismo: Mantener una rutina saludable, que incluya ejercicio regular, una dieta balanceada y tiempo para actividades recreativas. La salud física y mental están estrechamente relacionadas.
A estas recomendaciones, Naranjo, agregó que es necesario que las personas se den la oportunidad de sentir, aceptar esas emociones, es necesario normalizar que se es humano y que existe la posibilidad de ser rechazado. No obstante, es esencial evitar que estos sentimientos se prolonguen y mantener el enfoque. "Si el sentimiento persiste, es recomendable complementar la búsqueda de empleo con actividades adicionales, como ejercicio físico, meditación o técnicas de relajación", sugirió la especialista.
Identificar los puntos de mejora
Para evitar que la autoestima se vea afectada, se genere bloqueo emocional o frustración, es importante tomar acción. Juliana Naranjo recomendó “confiar en tus habilidades y mantener una actitud positiva, ya que cada rechazo ofrece una oportunidad para mejorar”. También hizo una invitación a que los candidatos hagan una autoevaluación, que se pregunten qué se puede mejorar para el próximo proceso, y, si es posible, solicitar retroalimentación a la empresa. Esto puede ser útil para futuras búsquedas, prepararse mejor y enfrentar las próximas entrevistas con una actitud destacada.
Además, a nivel profesional, recomendó realizar las siguientes acciones:
-Examinar cuidadosamente la oferta laboral para asegurar que cumpla con todos los requisitos establecidos.
-Adaptar el currículum vitae específicamente para la oferta en cuestión.
-Investigar sobre la empresa para conocer su cultura y evaluar si realmente se ajusta a sus valores y métodos de trabajo.
-Prepararse adecuadamente para las entrevistas, elaborando un discurso que resuma quién eres, que mencione los intereses y, lo más importante, enfocar la conversación en lo que el entrevistador realmente desea saber sobre la experiencia profesional, incluyendo desafíos enfrentados, soluciones propuestas, debilidades y cómo sé gestionando esto.
