"El mercado se inundó", definen voces del sector para resumir la crisis en la cual está sumergida la industria de las bicicletas en Chile, un fenómeno que comenzó a gestarse luego de la pandemia y tras un frenesí de ventas que se agotó, derivando en un mar de inventario casi imposible de desarmar sin caer en pérdidas de proporciones, cobrando, por supuesto, las primeras víctimas.
Tras el gran confinamiento producto del covid-19, Chile y el mundo fueron testigos de cómo se desató un verdadero "boom" de las bicicletas, un mercado que se transformó en una mina de oro el cual todos querían explotar ante las ansias de libertad de las personas y el compromiso de algunos de hacer del ciclismo una práctica habitual en sus vidas.
La demanda literalmente se disparó a nivel global, alcanzando alzas en ventas de hasta un 5.000% en algunos lugares. Los precios, por cierto, se fueron a las nubes, pero no fue un impedimento para seguir vendiendo
-y produciendo-.
En Europa, por ejemplo, la venta de bicicletas en 2020 se multiplicó por dos o hasta tres veces, según la cadena de tiendas de artículos deportivos Decathlon. En China, las ventas se multiplicaron por cinco, y en Estados Unidos las ventas online de bicicletas alcanzaron un máximo histórico en mayo de ese año.
Chile no fue para nada la excepción. Pero todo lo que sube tiene que bajar. Con el paso del tiempo, la demanda se desplomó, la sobreproducción se desató y comenzó el sufrimiento del sobrestock. El golpe a la estabilidad financiera del rubro ha sido duro.
"La demanda estaba completamente alterada", dicen desde la industria, lo que después, al normalizarse, provocó la saturación del mercado. Y varios no pudieron escapar del colapso de inventario, ya que había compromisos contractuales de volúmenes con las fábricas que no podían deshacer y las deudas contraídas para traer y traer bicicletas comenzaron a acechar.
Víctimas
Un fiel reflejo de esto es lo que se conoció esta semana con Andes Industrial, el mayor importador de bicicletas del país. Anunció el inicio de un proceso de reestructuración financiera para evitar la quiebra. Con más de 50 años de trayectoria, la empresa propiedad de la familia Gelfenstein busca renegociar sus deudas con los bancos acreedores, que ascienden a casi $17.000 millones.
Andes Industrial explicó que el sector ha sido golpeado por varios factores, incluyendo la crisis de stock, el transporte global postpandemia, el alza del dólar, la inflación y la desaceleración económica en Chile. "Esta decisión se ha tomado con el fin de superar las dificultades momentáneas que enfrentamos debido a algunos compromisos comerciales con nuestros acreedores financieros", declaró.
En julio del año pasado, Oxford, una de las marcas de bicicletas más populares en Chile, se posicionaba entre las primeras víctimas. Fundada en 1956 en Arica implementó una reestructuración interna que incluyó la desvinculación de 28 trabajadores, debido al aumento de los costos operativos y una caída del 52% en las ventas durante 2022, equivalente a $9.100 millones menos en ingresos.
La situación de Oxford se complicó aún más con una demanda por presunto despido injustificado, tras la reducción de su plantilla. La empresa aseguró que, de no haber tomado estas medidas, habría puesto en riesgo su estabilidad financiera, ya que la estructura de costos se volvió insostenible en el actual escenario comercial.
Y este año, en enero, otra de las grandes del mercado nacional había solicitado su reestructuración judicial: MKR, fundada en 1950 y reconocida por sus 1.500 puntos de venta en el país, incluyendo las tiendas Extreme Zone. Con pasivos que superaban los $9.200 millones, la compañía informó que la pandemia impulsó las ventas de bicicletas de forma inesperada, pero que la posterior desaceleración puso en jaque su situación financiera.
Hoy la situación para MKR, eso sí, cambió. En una junta deliberativa en mayo se presentó un plan comercial y financiero a los acreedores. El plan fue aprobado unánimemente, lo que permitió reestructurar la empresa y así, "volver a enfocarse en el negocio", cuentan a Emol desde la compañía.
"La reorganización judicial ya se aprobó -de manera unánime- y ya estamos con la deuda reestructurada y estamos enfocados en salir adelante. Ojalá que el mercado nos acompañe", afirmaron.
En paralelo, las grandes del retail chileno también sufren. Fuentes conocedoras de la situación aseguran que la estrategia hace un buen tiempo es liquidar. Los precios se han ido a pique, asumiendo pérdidas de varios millones de pesos y márgenes negativos que superan el 25%. Comparando el primer semestre de 2021 -en plena "locura" de las ventas- con los primeros seis meses de este año, las ventas de bicicletas se han desplomado cerca de un 70%.
Estas mismas fuentes aseguran que hoy gran parte de las bicicletas a la venta en reconocidas multitiendas son marcas propias y en muchísima menor medida marcas de proveedores nacionales, un giro en 180 grados respecto de lo que era la realidad hace un par de años. Esta señal es relevante -dicen-, dado que las marcas propias son las bicicletas importadas, lo que demuestra el sobrestock del que están intentando deshacerse las casas comerciales.
"No todo está perdido"
Frente drásticos cambios en los últimos años en el mercado de las bicicletas, Juan Mena, gerente comercial de la histórica tienda "El rey de la bicicleta", con más de 50 años en el rubro, afirma que también se benefició de la explosión de ventas que generó la pandemia, gracias a factores como los retiros de fondos previsionales y el aumento en la actividad física al aire libre. Sin embargo, este auge fue efímero. "La Navidad de 2022 fue la peor que he visto en 51 años de historia", señalo Mena a Emol.
El panorama actual sigue siendo desafiante. Mena comentó que, aunque la Navidad de 2023 mostró un repunte respecto al año anterior, las ventas alcanzaron solo el 50% de lo que solía ser una Navidad tradicional. Las expectativas para 2024 son moderadamente optimistas, con la esperanza de acercarse a un nivel normal de ventas.
"Las empresas que logren sortear esto deberían estar tranquilas porque el mercado hacia adelante se ve atractivo".
Jaime Fuentes, de MKR
El sobrestock es el problema. "Quedaste con mucha mercadería y esa plata en bodega empieza a jugar en contra", sostuvo, quien coincide en que este exceso de inventario ha llevado a varios a vender bicicletas por debajo del costo.
A modo de ejemplo, Mena menciona que, si antes la tienda manejaba un nivel de ventas del 100%, durante la pandemia subió a 250% para luego caer a un 10% en 2022. Hoy, el mercado se ha recuperado parcialmente, "situándose en un 70% de la normalidad".
En tanto, Jaime Fuentes, gerente general de MKR, sostuvo a Emol que en la pandemia "era una locura. yo diría que todas las empresas prácticamente agotaron su inventario. Las empresas tuvieron un crecimiento desde un 70% hasta un 200% de la venta. Pero la situación hoy es completamente inversa. Tenemos contracción de mercado y exceso de inventario".
Pese a ello, es más bien optimista. "La situación es difícil, pero no está todo perdido", afirmó.
"Hay mucha expectativa de lo que va a pasar en el verano, porque este negocio es muy cíclico (...). Las empresas que logren sortear esto deberían estar tranquilas porque el mercado hacia adelante se ve atractivo", concluyó.