El oro alcanzo ayer un máximo histórico en los mercados internacionales y elevo por primera vez la cotización del lingote del metal a un valor superior al millón de dólares, en medio de una mayor demanda por el atractivo de ser un tradicional "refugio financiero", cuando los inversionistas esperan próximos recortes de tasas y observan una menor fortaleza del dólar y de los bonos del Tesoro estadounidense. La onza troy de oro subió hasta US$ 2.514 el martes, mientras los operadores centran su atención en los comentarios del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a fines de esta semana. Los lingotes de oro normalmente pesan alrededor de 400 onzas, por lo que cada uno vale US$ 1,005 millones tras la cotización alcanzada ayer. El oro ha sido tradicionalmente considerado un activo confiable y atemporal en las reservas de divisas, es decir, un "refugio seguro" cuando la economía o mercados enfrentan turbulencias o volatilidades. Junto con poseer tangibilidad, se destaca por su escasez natural que lo protege contra la inflación o devaluación monetaria.
