La Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur) calificó como una "situación compleja" el paro que iniciará a partir de mañana el sindicato de trabajadores del aeropuerto Nueva Pudahuel. No obstante, la institución llamó a la calma. "Nos han señalado que el funcionamiento y los vuelos están garantizados, al igual que la seguridad", dijo la presidenta de la entidad, Mónica Zalaquett.
"Hemos estado en contacto con la concesionaria y los servicios públicos que operan en el aeropuerto", comentó Zalaquett. Asimismo, agregó que "se nos ha informado que para estos días se reforzará la atención del personal de la PDI en las casetas de Policía Internacional y el SAG, mediante un plan de contingencia especial para evitar mayores aglomeraciones".
En esa línea añadió: "Es muy importante que los usuarios se organicen y planifiquen su llegada al recinto aeroportuario, considerando que podrían registrarse algunas demoras en la atención". Sugirió, así, llegar con las horas de antelación que las aerolíneas solicitan para evitar inconvenientes.
La Cámara Nacional de Comercio (CNC) manifestó mayor preocupación. "Este paro tiene el potencial de causar un colapso aeroportuario y acá hay un damnificado muy grande que es nuestra imagen país", señaló el presidente de la institución, José Pakomio.
También aseguró que "si de verdad queremos consolidarnos como destino turístico, no es posible que la concesionaria y los trabajadores no hayan podido llegar a un acuerdo pronto".
En un comienzo, el paro iba a comenzar hoy a las 00:00 horas. Sin embargo, las negociaciones entre los trabajadores y la concesionaria se extendieron. De cualquier modo, no se logró llegar a un acuerdo. La paralización comienza mañana e incluye a los trabajadores del área comercial, como del área técnica, financiera y operacional.
Según informó ADN, existieron conversaciones en torno a las remuneraciones y colaciones, este último se convirtió en el punto clave de discusión. Ya que, a los trabajadores se les pagan $4.500 diarios, y en los últimos 9 años, este monto han aumentado solamente $500, cuando la colación más barata cuesta alrededor de $9.000, señalan.
De esta manera, el sindicato exige que se les entregue un monto suficiente para poder comprar comida al interior del aeropuerto.
