La decisión de Colbún de suspender el megaproyecto central Paposo en Antofagasta, debido a las reiteradas impugnaciones del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Antofagasta, terminó con la salida del director del SEA de esa región, Ramón Guajardo, a quien se le solicitó la renuncia no voluntaria.
El episodio cuenta con toda una trastienda, que incluye la molestia en sectores del Gobierno, una compleja tramitación para Colbún, desprolijidades en ese proceso y una descoordinación de las autoridades ambientales. La compañía, en tanto, no tiene intenciones de seguir adelante.
La tramitación y sus desprolijidades
El 31 de mayo, Colbún anunció que había ingresado al SEA el proyecto central Pamposo en la comuna de Taltal, Antofagasta. Esto, con una inversión de US$1.400 millones y con la intención de levantar una planta desaladora, una instalación de bombeo y una generadora de energía limpia con una potencia de 800 MW.
A los pocos días, todo comenzó a enredarse. El 6 de junio la misma eléctrica desiste del procedimiento de evaluación ambiental. ¿La razón? El nombre con el que se presentó el proyecto no habría reflejado las distintas unidades que componían la iniciativa.
Aquello se corrigió. El 10 de junio se presentó la iniciativa como "Central de Bombeo Paposo para almacenamiento, generación y transporte de energía". El Estudio de Impacto Ambiental (EIA) fue acogido a trámite por la dirección regional. Dos días después, sin embargo, la entidad estatal resolvió el término anticipado del trámite ¿La razón? Falta de información relevante.
Tras ello, Colbún apeló con un recurso de reposición. Pero el 17 de septiembre el SEA de Antofagasta informó que mantendría el término anticipado, al plantear nuevos reparos. Con esos antecedentes en cuenta, finalmente, el 24 de este mes la compañía optó por suspender el proyecto.
Según reporteo de La Tercera, en medio de todo esto, la oficina regional de Antofagasta solicitó el 19 de julio apoyo a la unidad central del SEA, con el objetivo de poder evaluar mejor la iniciativa de Colbún. La respuesta habría sido que no se podía atender a esa solicitud por falta de horas humanas de los profesionales.
"La resolución de la autoridad es poco coherente y contiene errores formales evidentes, cuestiones que van en sentido contrario a dar señales claras y dar certeza jurídica para el avance de los proyectos", había advertido Colbún, antes de comunicar su decisión.
El Mercurio hizo una revisión de los documentos emanados por el SEA durante el proceso. Allí encontró antecedentes que califica como "llamativos". En su resolución del 12 de agosto, el la entidad criticó especialmente los análisis del EIA de Colbún en su relación con las comunidades.
La generadora tomó cartas en el asunto y subsanó las materias. Esto, constata el medio citado, fue aceptado por el SEA el 17 de septiembre. Sin embargo, en ese nuevo informe la institución añadió asuntos que no había mencionado en la resolución de un mes antes.
Así, se incorporaron observaciones del SAG, relativas al farellón costero próximo a Taltal. Una señala: "Se solicita realizar una nueva revisión bibliográfica sobre las especies potenciales en el área de influencia, debido a que se detecta la falta de especies de importancia como por ejemplo, golondrinas de mar, aves migratorias, chinchilla de cola larga, entre otras".
En esa misma resolución se cita un considerando con el numeral "11.8". No obstante, no existe ese considerando en el documento.
La molestia del gobierno y la postura del SEA
La decisión del SEA, que derivó en la suspensión del proyecto por parte de Colbún, no cayó bien en el Ejecutivo. De acuerdo a fuentes de El Mercurio, hubo molestia en los ministerios de Economía y Energía. En tanto, desde Hacienda, el titular de la cartera, Mario Marcel, comentó que "uno no debería alegrarse de que un proyecto de inversión se caiga".
Hoy, en entrevista con Radio Pauta, Marcel volvió a referirse al tema y manifestó que "a veces hay funcionarios o unidades que se les pasa un poco la mano en estos procedimientos".
Conocedores del proceso, consultados por el medio citado, indicaron que no había coincidencia a nivel central del SEA, con la determinación que se tomó en Antofagasta.
Otra fuente planteó que la salida del director de la entidad de Antofagasta no resuelve el problema de fondo: la necesidad de una coordinación institucional entre distintos servicios públicos involucrados.
La renuncia y Colbún sin intenciones de retomar
La renuncia de Ramón Guajardo -químico de la U. de Chile y profesional con amplia trayectoria- se concretó la noche de ayer, a las 22:40 horas y por medio de un correo electrónico a la directora nacional del SEA, Valentina Durán, según reporteó La Tercera.
"Por medio de la presente, y conforme a lo solicitado en su comunicación de fecha 25 de septiembre del presente, quien suscribe a partir de la fecha 30 de septiembre de 2024 presenta su renuncia no voluntaria al cargo de director regional del Servicio de Evaluación Ambiental región de Antofagasta", dice el e-mail recogido por el medio citado.
Así, continúa señalando: "Se hace presente, que dicho requerimiento se efectúa en calidad de no voluntaria en virtud de petición de renuncia de la autoridad antes de concluir el plazo de nombramiento o de su renovación, no concurriendo causal derivada de responsabilidad administrativa, civil o penal, todo conforme al artículo 58º de la ley 19.008 82 y sus modificaciones".
Poco antes de esto, Durán ofreció apoyo técnico a Colbún en la tramitación de la iniciativa. Pero -al menos según las declaraciones de hoy- retomar el proyecto no estaría en los planes.
"Por ahora, hasta que no tengamos certeza respecto a los criterios de evaluación, hasta una cierta certidumbre en los plazos que esto significaría, es difícil tomar esa decisión (de continuar)", señaló esta mañana a Radio Infinita José Ignacio Escobar, CEO de Colbún.
"Este proyecto inició sus primeras líneas base hace más de dos años, en un profundo entendimiento, a nuestro juicio, de la flora, la fauna, las comunidades indígenas; todo lo que es la topología de este proyecto inserto en la comunidad de Paposo y que, claro, ahora tenemos que volver a repensar todo eso", añadió.
En tanto, Daniel Gordon, gerente de Sostenibilidad y Asuntos Públicos de la empresa, aseguró: "Esta decisión (el apoyo técnico que ofreció el SEA) no corrige ni subsana las negativas consecuencias que se han generado para el país, la región y este proyecto".